El Jaguar I-PACE se sitúa como una de las opciones más atractivas del mercado para quienes buscan un vehículo que sea respetuoso con el medio ambiente, un diseño atractivo, un amplio espacio interior, las últimas tecnologías en cuestiones de seguridad y, sobre todo, que lo necesite tanto para el día a día como para sus escapadas de fin de semana.
Por algo ha sido designado este SUV de tamaño medio como Coche del Año, Diseño del Año y Coche Sostenible del 2019 en los World Car Awards. Se presenta con dos motores eléctricos, cada uno asociado a un eje que, juntos, además de dotar al vehículo de tracción total responden con una potencia de 400 CV y 696 Nm de par, por lo que va sobrado de prestaciones, mientras que su batería de ión litio de 90 kWh le confiere una autonomía de hasta 470 km (según ciclo WLTP).
Se postula como un todocamino pensado para el máxima aprovechamiento de toda la familia. Cuenta con 5 plazas reales y un sinfín de huecos portaobjetos repartidos por todo el habitáculo, uno de los beneficios de contar con una mecánica eléctrica, que permite unos voladizos cortos, y por la ausencia de algunos de los elementos mecánicos que van asociados a los propulsores tradicionales.
Así, donde debería situarse el túnel de transmisión hay un hueco que acoge 10,5 litros mientras que bajo los asientos existe un hueco para colocar unos portátiles. Y eso que de maletero va muy bien dotado, 656 litros que pueden alcanzar los 1.453 litros en caso de abatir los respaldos de las plazas traseras.
El interior del Jaguar I-PACE también se ha configurado como un vehículo completamente tecnológico. Así, a una excelente disposición de materiales que le dotan de la calidad y calidez, rasgo habitual en la familia Jaguar, se suma un nuevo sistema de infoentretenimiento Touch Pro Duo que combina varias pantallas táctiles, sensores capacitivos y controles físicos que permiten un mayor y mejor control de muchos de los comandos del vehículo.
El nuevo sistema de infoentretenimiento del Jaguar I-PACE permite, además, la conexión del coche con una nueva aplicación móvil desarrollada por la compañía. Mediante esta, uno podrá estar informado sobre la autonomía del vehículo o el momento en el que necesita realizar alguna operación de mantenimiento, pero también podrá preparar el habitáculo antes de que llegue el propietario para que lo encuentre caliente en momento de bajas temperaturas, por ejemplo.
El vehículo se ha creado partiendo de cero y pensando en todo momento en las necesidades que establece un vehículo eléctrico. Así, el chasis de bajo peso (de aluminio reforzado), cuenta con un amplio espacio entre ambos ejes para que acoja las baterías. La suspensión delantera es de doble triángulo y la trasera es multibrazo. Además, la suspensión neumática opcional con Adaptative Dynamics absorbe los baches con total naturalidad bajo cualquier situación.
El centro de gravedad resulta realmente bajo, lo que permite una gran estabilidad en curva, de lo que también se encarga la amortiguación variable continua, mientras que un diferencial establecerá el modo en el que se debe entregar la potencia en todo momento.
Los 400 CV no se entregan en todo momento, sino que será la centralita del Jaguar I-PACE la que gestione el par que se entrega a cada eje en todo momento para lograr una conducción deportiva, ágil y equilibrada.
Para lograr la mayor eficiencia de las baterías, estas están refrigeradas para que tengan la temperatura óptima en todo momento. Gracias al nuevo sistema de infoentretenimiento, el vehículo monitoriza la ruta que sigue el vehículo y reconoce nuestros hábitos al volante y prepara el vehículo para algunos de nuestros comportamientos para lograr el mayor aprovechamiento de la electricidad.
Eso, sumado al sistema de regeneración de la carga mediante la frenada (se puede calibrar la intensidad de la frenada) que, en el nivel más intenso, consigue frenar el vehículo con una deceleración de 0,4 G. Este compendio de ayudas a la regeneración permitiría una autonomía extra de hasta 50 km.
Su batería de 90 kW se puede cargar mediante un Wall Box de los que se instalan en casa. Requiere de 10 horas para cargar el 80 %, aunque con un sistema de carga ultrarrápido de 100 kW podrá recargar al 80 % de la batería en 40 minutos. En este caso, se podrían disponer de 100 km con solo 15 minutos de conexión.
Estos tiempos de carga son, precisamente, los que hacen compatible que los coches eléctricos ya se puedan tomar como una opción interesante para realizar un viaje de largo recorrido. Mientras uno come, el coche se recarga, y reemprende el viaje cuando la batería esté casi cargada.
El vehículo ya está a la venta con tres acabados disponibles S, SE y HSE. Su precio de partida es de 80.400 euros