El Gobierno de Islas Baleares aprueba la prohibición de circulación de coches, motos, furgonetas y camiones diésel nuevos a partir de 2025
El Parlamento de las Islas Baleares, gobernado por la socialista Francina Armengol, ha aprobado hoy el anteproyecto de la Ley de Cambio Climático y Transición Energética. En este, entre otros muchos puntos, se incluye la prohibición de circulación de vehículos diésel nuevos a partir de 2025 y de gasolina nuevos a partir de 2035, para prohibirlos definitivamente a partir de 2050. Además, incluye cuotas de vehículos eléctricos a las compañías de alquiler de coches a partir del próximo año.
Esto se traduce en que no solo se imposibilitará el acceso de vehículos con estas mecánicas de fuera de esta comunidad, sino que, también se prohibirá la venta de vehículos diésel en seis años. Y los de gasolina en 16. Sin embargo, sí que se permitirá la circulación de los automóviles y motos que hayan sido matriculados con antelación. Al menos, se podrán utilizar hasta 2050. En esta fecha, serán eliminados de las carreteras de las Islas Baleares.
En esta ley se incluyen ayudas a la compra de vehículos. Aunque estas no serán para todos los que adquieran un vehículo eléctrico. Estarán destinadas a sectores como los del taxi o las empresas de alquiler de vehículos. Estos últimos deberán contar con un 2 % de su flota de vehículos eléctricos este año, una cifra que se irá incrementando en los próximos años.
Ley con polémica desde el inicio
Fue en septiembre cuando se supo por primera vez de las intenciones del ejecutivo balear. Así, el Gobierno de Armengol fue un paso más allá de los planes del Gobierno de Pedro Sánchez de prohibir las ventas de estas mecánicas a partir de 2040. Las reacciones no se hicieron esperar. Y llegaron desde todos los sectores. Especialmente de la industria del automóvil.
Aludían a que las mecánicas de los vehículos diésel han evolucionado en los últimos años, hasta el punto de reducir en un importante porcentaje las emisiones de NOx y, sobre todo, de CO2, el causante del efecto invernadero y del calentamiento del planeta.
Las denuncias llegaron a Europa
Además, Anfac, la patronal de los fabricantes, denunció esta ley a Europa, donde fue admitida a trámite para su análisis pormenorizado a pesar de que, en un principio, un vocal había aceptado líneas de actuación como las de Islas Baleares por encontrarse en la senda de las normas que desean implantar desde Europa. Esta, tan solo, aumentaba la incidencia de una ley que ya se había planteado a nivel comunitario.
Pero no ha quedado ahí todo. Los concesionarios aseguran que esta ley será un golpe para la economía de Islas Baleares. Y para ellos mismos. La oferta comercial aún es muy corta, incluso hay marcas que carecen de vehículos eléctricos en oferta por lo que hay concesionarios que se ven abocados al cierre. Además, las islas carecen de la infraestructura necesaria para la recarga masiva de este tipo de vehículos.
El último en pronunciarse ha sido el presidente de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, José María Marín, quien ha señalado por escrito que esta prohibición vulnera en algunos aspectos la ley de la libre competencia.
El precio de ser los primeros
A pesar de la polémica que ha rodeado esta ley, finalmente ha sido aprobada por el parlamento balear. Solo ha encontrado la negativa de Partido Popular y Ciudadanos a algunos de los puntos que entronca dicha ley.
Tras la aprobación del anteproyecto de ley, la cual podría sufrir cambios en el proceso de desarrollo, Marc Pons, consejera de Territorio, Energía y Movilidad apuntó que “ser los primeros siempre tiene riesgos. Pero no nos podemos permitir el lujo de perder más tiempo. La sostenibilidad energética puede y debe ser un atractivo más”, esto último en clara referencia a su Comunidad Autónoma como destino turístico.
Permiso especial para circular por Formentera
El caso de la isla de Formentera es especial. A partir de este verano, el gobierno establecerá un sistema de licencias para acceder con un vehículo matriculado fuera de esta isla. Quien quiera acceder con su coche o moto en barco necesitará de un permiso especial de la Consejería de Formentera. El objetivo es controlar el flujo de vehículos y no saturar la isla de coches y motos.