Probamos el Hyundai i30 Fastback

Fotos: Paloma Soria.

La gama Hyundai i30 sigue creciendo. Tras el compacto 5 puertas, el familiar y la variante deportiva N, llega un Fastback dispuesto a crear un nuevo nicho entre los generalistas. El i30 pone ahora la mejor de sus caras y se luce en un mercado en el que apenas tiene rival.

¿Tiene sentido un compacto de perfil cupé y 5 puertas? Déjame ir un paso más allá: ¿tiene esto sentido en el mercado generalista? Este tipo de movimientos estratégicos son propios de un segmento premium pero Hyundai , y de paso todo el grupo Hyundai-Kia, está invirtiendo la situación. Ahí tenemos el atrevido Kia Stinger y su irreverente disposición, un claro ejemplo de éxito mediático que, con matices, pretende emular este i30 Fastback.

Algunos detalles

Míralo, si hasta su apellido es pretencioso, una denominación que alude a las clásicas carrocerías del pasado siglo. Personalmente sus formas me recuerdan a los compactos de finales de los años 90, con su escueto tercer volumen imitando la silueta de un sedán a tamaño achicado. Hyundai se ha lucido, es bonito y, sobre todo, llamativo, aunque ya puestos podría haber rematado mejor algún detalle, como ese escape solitario y poco integrado que nos devuelve a la realidad: no es un cupé deportivo, sino una variante del más convencional i30. A todo esto, es 11,5 centímetros más largo que el i30, pero también más bajo (3 cm).

Dentro la cosa no cambia tanto, de hecho es una réplica de lo presente en el conocido compacto: diseño sencillo pero moderno, buena calidad general y una pantalla flotante para el sistema multimedia de gran tamaño bien posicionada en la parte superior del salpicadero. Sencilla pero intuitiva, esta integra los sistemas Apple CarPlay y Android Auto, una apuesta por la seguridad que se completa con elementos como el avisador de presencia en el ángulo muerto, control de velocidad de crucero adaptativo o frenada de emergencia automática; todos de serie en este acabado Style.

No tan amplio

Hasta ahora todo son buenas noticias, pero llegamos a su punto más crítico: la habitabilidad. Es de esperar que un formato cupé penalice el espacio interior, y así ocurre. Las plazas traseras gozan de buen hueco para las piernas, pero la altura para las cabezas es muy justa para ocupantes a partir de 1,75 m. El acceso también se complica.

En contrapartida, el maletero es mucho más capaz que el de un i30 estándar, que con sus 450 litros supera ampliamente a su competencia compacta. Y lo mejor de todo es que guarda el portón, ampliando la boca de carga y manteniendo un cierto regusto familiar. Ojo, la visibilidad trasera es una de sus peores notas.

Nuevo carácter

Con solo dos motores gasolina en su gama, el 1.4 T-GDi de 140 CV y 1.0 T-GDi de 120 CV (habrá dos diésel de 110 y 136 CV), el primero y objeto de nuestra prueba se erige como la alternativa más capaz y deportiva hasta la llegada del ‘N’ de no menos de 250 CV, previsto para finales de año. Se trata de un propulsor extremadamente suave y refinado, tal vez sin esa garra que esperaríamos en un vehículo de este corte: es ágil, no deportivo.

La única caja de cambios asociada es una de doble embrague y 7 relaciones, rápida y efectiva, muy precisa, aunque siempre empeñada en hacer girar el motor muy bajo de vueltas. Favorece esto un consumo que, sin ser especialmente reducido, marca una media correcta en torno a los 7,5 l/100 km.

Estilo y dinámica

Por fortuna no se trata únicamente de una cara bonita, Hyundai ha afinado el chasis de su i30 Fastback hasta el punto de diferenciarlo lo suficiente del modelo de base como para hablar de dos caracteres diferentes. La suspensión es un 15 % más firme (y más baja), pero de esos porcentajes que en la práctica se notan. De nuevo, no es deportivo, pero sí proporciona una mejor experiencia de conducción que un i30 5p. Es más ágil y divertido pero, sobre todo, fácil de conducir. Y no por ello más incómodo. Bien podría el i30 5 puertas adoptar esta lograda puesta a punto.

¿Tiene entonces sentido? Pues verás, su estilo y mejor dinámica no implican un precio muy superior, siempre comparándolo con el modelo del que deriva. Este acabado Style lo lleva absolutamente todo y tiene la misma tarifa que el i30 más equipado a igualdad de motor. ¿Algún compacto más atractivo en el mercado?

Ficha técnica del Hyundai i30 Fastback 1.4 T-GDI 140 CV DCT Style

Equipamiento de serie: Frenada de emergencia automática; asistente de mantenimiento y cambio involuntario de carril; avisador de presencia en el ángulo muerto; asistente de luz de carretera; control de velocidad de crucero adaptativo; avisador de tráfico trasero cruzado; iluminación de tipo LED; selector de modos de conducción; sensores de aparcamiento traseros; cámara de visión trasera; sensores de luz y lluvia; sistema multimedia con pantalla táctil de 8 pulgadas; Bluetooth; Apple CarPlay y Android Auto; navegador; climatizador bizona; freno de estacionamiento eléctrico; sistema de carga inalámbrica para dispositivos móviles; asientos delanteros eléctricos; retrovisor interior fotosensible; techo solar panorámico y llantas de 18 pulgadas.

Opciones: pintura metalizada Clan Slate (200 €).