Hyundai ya comercializa en España el nuevo i30 N, su primer vehículo de altas prestaciones bajo la inédita línea N. Desarrollado en Namyang, el centro de I+D global de Hyundai Motor en Corea del Sur, y perfeccionado en Nürburgring (allí fue sometido a pruebas de durabilidad de 10.000 km), el nuevo deportivo asiático se beneficia de la experiencia de Hyundai Motorsport en el WRC desde 2014, y también de las nociones de Albert Biermann, hasta no hace mucho responsable de la definición de BMW M.
Texto: Eduardo Cano
Competidor de modelos como los Honda Civic Type-R, Renault Mégane R.S., Peugeot 308 GTi, SEAT León CUPRA/CUPRA R o Volkswagen Golf GTI/R, el nuevo i30 N disfruta de soluciones como la función Overboost, que incrementa el par límite un 8% y la aceleración de un 6 a un 7% durante 18 segundos, pisando a fondo.
Escape con doble silenciador y válvula variable, instrumentación con pantalla tipo flotante de 8 pulgadas con medidor de fuerza G, contador de tiempos por vuelta, datos de par y potencia… El diseño exterior es hasta discreto, pero entre otros incluye parrilla, parachoques y un nuevo spoiler trasero diferenciados.
Se vale de un motor turbo de gasolina 2.0 de inyección directa y 250 ó 275 CV, según versión, siempre con 353 Nm (378 Nm activada la función Overboost); el primero marca un 0 a 100 km/h de 6,4 segundos y el segundo de 6,1, siempre con un tope de 250 km/h.
Conforme a nuestras primeras sensaciones atravesando los puertos de montaña que jalonan la sierra madrileña, al menos el más enérgico (entre otros, con pinzas de freno fijas delanteras con la grafía N) ofrece una respuesta elástica, rabiosa y directa, en parte por la sobrealimentación, de reacción rápida. Es muy reactivo, pero también sencillo de conducir y apto para usarlo a diario.
El i30 N es de tracción delantera y asocia, como única alternativa, transmisión manual de seis velocidades, de guiado y movimientos cortos y precisos. El chasis pisa sobre neumáticos de alto rendimiento Michelin Pilot Super Sport 225/40, de 18 pulgadas, o Pirelli P Zero 235/35, de 19, según la potencia. Y la dirección, asistida por un motor eléctrico en la cremallera R-MDPS, es muy directa (2 vueltas de volante entre topes) y precisa. Eso sí, el radio de giro es elevado, mucho para un coche compacto.
De nuevo sobre el tren de rodaje, con tren delantero N Power Sense que aporta mayor rigidez sobre la versión convencional y reduce altura frente a la definición del i30 estándar. El coche combina suspensión electrónica ECS, que reduce el balanceo y aumenta la velocidad de paso por curva. A su vez, admite ajuste de amortiguadores desde un tarado que prima al confort hasta otro ideado para lograr el máximo rendimiento en circuito. En marcha, las diferencias son muy apreciables.
No falta un diferencial con autoblocante electrónico de deslizamiento limitado E-LSD que mejora el agarre al neutralizar ‘pérdidas de rueda’ acelerando en virajes (gana un 5% la velocidad de paso por curva). Además, el control electrónico de estabilidad ESC se puede desconectar del todo.
Dentro, buena calidad y elementos como asientos deportivos desarrollados en exclusiva; ofrecen mucho agarre y son firmes, pero también confortables después de un trayecto prolongado.
Una de sus peculiaridades son sus 5 modos de conducción: Eco, Normal, Sport, N y N Custom (permite multitud de combinaciones). Se seleccionan a través de dos botones sobre el volante y cambian por completo el carácter del coche al modificar los parámetros del rendimiento del motor, los amortiguadores, el ESC, el diferencial N con autoblocante electrónico, el sonido, la dirección y la función Rev Matching (efecto doble embrague). Por contar, el i30 N cuenta hasta con función Launch Control de máxima aceleración desde parado (autoriza un cierto deslizamiento).
Sus frenos incluyen función de enfriamiento adicional mediante tomas de aire en el parachoques delantero, mientras que la elevada rigidez del bastidor (dice Hyundai que la mejor de la categoría) gana puntos al dotarse de barra de refuerzo detrás de los asientos traseros y piezas adicionales adheridas a los bajos; el embrague es de alta resistencia.
Disponible en tonalidades como el exclusivo tono Performance Blue de las imágenes, también se puede pedir con los Clean Slate, Polar White, Micron Gray y Phantom Black o Engine Red. Todos, salvo el último, combinan ribetes rojos en el exterior y detalles similares en el habitáculo.
Hyundai i30 N 250 CV: 33.900 €
Hyundai i30 N 250 CV Sky (con techo solar): 34.900 €
Hyundai i30 N Pack Perfomance 275 CV: 37.900 €
Hyundai i30 N Perfomance 275 CV Sky (con techo solar): 38.900 €
*Hay un descuento promocional de 6.500 € para las 2 variantes