Tenemos nueva marca a batir: 467 km/h. Sí, ese es el nuevo récord de velocidad marcado por un vehículo de calle. Este nuevo registro lo ha logrado el Hennessey Venom F5, superando así la anterior máxima de 435,31 km/h que consiguió el mismo vehículo en 2014, aunque en aquella ocasión se trataba de una evolución denominada Hennessey Venom GT, una cifra que a día de hoy perdura en el libro Guinnes de los Récords.
El modelo aún no se ha presentado, pues se dará a conocer en el próximo SEMA de Las Vegas, pero ya ha hecho pública su velocidad máxima para ir creando expectación. Por el momento se conocen muy pocos datos sobre su mecánica y capacidades, aunque se cree que su motor dispondrá 1.451 CV y en su estructura habrá presencia masiva de la fibra de carbono para reducir peso y conseguir tales prestaciones.
Tampoco se conoce la producción que tendrá el coche ni su precio, pero se presupone que no será muy alta, primero por su coste, que sí será alto y estará al alcance de apenas un reducido grupo afortunados bolsillos, y por las capacidades de producción de la fábrica situada en Texas (Estados Unidos). De hecho, del Hennessey Venom GT, la anterior versión que consiguió el récord de velocidad, apenas se produjeron 29 unidades.
Ostentar el reconocimiento del coche más rápido del planeta es un privilegio, y no son pocos los superdeportivos que lo han buscado en los últimos años. Antes que el Venom F5 lo tuvo el Venom GT, y antes el Bugatti Veyron, conocido en todo el mundo como el coche del millón de euros o el de los 1.000 CV, aunque estas cifras, a día de hoy, pueden parecer ridículas teniendo en cuenta las que ya se están barajando.
Por el momento, el Hennessey Venom GT dispone de casi 1.500 CV, mientras que el Bugatti Chiron ya cuenta con 1.500 CV, aunque de este modelo se desconoce la velocidad máxima que puede alcanzar, aunque se presupone que rondaría los 450 km/h.
En este grupo de privilegiados también encontramos el Aston Martin Valkirie, un modelo que supera los 1.000 CV de potencia y que tiene una relación peso-potencia de 1 (kg) – 1 (CV); el Mercedes-AMG Project One, que cuenta con tecnología procedente de la Fórmula 1; o el Koenigsegg Regera que con una mecánica híbrida, como los anteriores, disfruta de 1.500 CV.