Los agentes de tráfico que más multas ponen reciben una bonificación mensual
Un agente de la Guardia Civil de tráfico destinado en Andalucía ha destapado las coacciones a las que son sometidos para que pongan más multas. Las continuas presiones a las que están sometidos han dividido el cuerpo entre los compañeros que deciden acatar las órdenes y los que no están de acuerdo con lo que les piden.
Muchos de ellos, según denuncia este guardia civil anónimo, reciben amenazas para que pongan, al menos, 50 multas al mes. Esto va en contra su vocación, que era ayudar a los ciudadanos. Actualmente, en cambio, notan que su cometido solo es recaudar dinero, a pesar de las complicaciones económicas por las que está atravesando la mayoría de la población.
Coacciones si no ponen las suficientes multas
Los superiores piden que los agentes sancionen, como mínimo, a 50 ciudadanos al mes. En algunos cuarteles, los que incumplen esta cifra pueden llegar a enfrentarse a reprimendas de sus jefes. Algunos, incluso, han tenido que pedir un cambio de destino para dejar de sufrir estas amenazas.
“No estoy dispuesto a estar perdiendo el tiempo en salvaros el culo y no sé si os lo salvará a todos. Ya os he calado a todos, sé el que viene a trabajar, sé quién es el que viene a trabajar y se acojona, sé el que viene a trabajar para tocarme los huevos, se acabó“, son algunas de las frases que tienen que escuchar los guardias civiles que se niegan a caer en las coacciones de sus superiores.
Los que sí acceden a multiplicar las multas a los ciudadanos, son recompensados con una bonificación extra que oscila entre los 100 y los 300 euros. El gran perjudicado de estas conductas es el propio ciudadano, al que obligan a pagar multas que, en algunas ocasiones, pueden llegar a ser dudosas.