El Gobierno ha dejado de obligar a las estaciones de servicio a incluir la gasolina E5 en su oferta de carburantes.
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Retro Demográfico ha eliminado la obligatoriedad a las gasolineras de ofrecer gasolina E5, en lo que es una apuesta por la más ‘verde’ gasolina E10. Aunque en ambos casos sea de 95 o 98 octanos, el incremento del porcentaje de etanol podría poner en riesgo algunas mecánicas.
La búsqueda de gasolinas más respetuosas con el medioambiente, que generaran menos gases nocivos en los motores, llevó a crear biocarburantes. Así, en su composición se introdujeron nuevos elementos que contaminaran menos como el etanol.
La denominación E5 atiende al porcentaje de etanol con el que cuenta, un 5 %, mientras que el E10 supone que el 10 % es de etanol. Con este cambio se logra una reducción de las emisiones de un 34 % en gases NOx, un 90 % en partículas y el 60 % en hidrocarburos.
Ahora, con la derogación de la regulación que obligaba a las gasolineras a ofrecer gasolina E5, serán estas las que elijan si ofrecen este carburante a sus clientes, lo que podría conllevar una retirada progresiva de surtidores.
Qué coches lo pueden utilizar
En realidad, cualquier vehículo de gasolina que haya fabricado a partir del año 2000 lo podría utilizar sin mayores problemas, aunque conviene asegurarse antes de reportar. Para ello, el Gobierno ha creado una web donde comprobar la compatibilidad de nuestro vehículo con la gasolina E10. Aquí la puedes comprobar.
En caso de error en el repostaje, desde el Gobierno se recomienda no vaciar el depósito aunque sí volver a rellenar el depósito cuando consideremos que hemos gastado varios litros para que así el porcentaje de etanol en el carburante del depósito vaya bajando. Además, también han creado un portal en el que uno puede buscar las estaciones de servicio que ofrecen gasolina E5.
Qué averías se pueden provocar
En principio este cambio en el porcentaje de etanol no debería provocar problemas a corto plazo. Si admite la presencia del etanol, esa diferencia de porcentaje no debería ser causa de problema a corto plazo. Pero sí a largo plazo.
Los primeros problemas pueden llegar a las gomas, plásticos y siliconas, que sufrirán un mayor desgaste, a lo que puede sumar la obstrucción de los carburadores, bombas de alimentación o inyectores. Otro punto a tener en cuenta es la lubricación, inferior en el caso del etanol comparado con la gasolina, algo que sufren los motores más antiguos que ya tienen problemas por la ausencia del azufre en los carburantes.