La venta de gasolina de 95 octanos, o E5 según la nueva nomenclatura de las gasolineras, está garantizada hasta el 31 de diciembre 2019. Su eliminación parece impensable más si atendemos a que actualmente, más de un cuarto de los vehículos en España emplean habitualmente este tipo de carburante para moverse. Aunque, la desaparición de este carburante es una posibilidad que se vislumbra en el horizonte.La responsable de regular esta disponibilidad es la Directiva 98/70/CE del Parlamento Europeo de 1998 sobre la calidad de los carburantes. Una normativa que obligaba a los estados pertenecientes a la Unión Europea a garantizar la presencia del carburante hasta el año 2013. A partir de entonces, mediante revisiones de ámbito nacional, se ha renovado el suministro y venta de este combustible. En España se hicieron prórrogas en 2016 y 2018. Y, la última de estas prórrogas situaba la siguiente revisión antes de fin de este año 2019.Y, por el momento, poco se sabe.
Ni siquiera está en la agenda
Normalmente nos referimos a la gasolina de 95 octanos como “gasolina”, pero este combustible recibe el nombre de gasolina de protección. Este carburante es el que necesitan los motores fabricados antes del año 2000.
Las prórrogas se conceden según la edad media del parque móvil. En España, esta media se sitúa en más de 12 años de antigüedad. Pero más significativo es que, la cantidad de coches que necesitan gasolina al término de 2017, se cuantificaban en diez millones. De esa cantidad, más de un tercio, tres millones y medio, eran coches matriculados antes de 2000.
¿Está en peligro?
Con una tasa de renovación inferior al 3% anual, parece difícil que la siguiente prórroga fuese rechazada ya que hablamos de rescindir el suministro de gasolina a millones de coches. La estimación es que, a finales de 2019, el 27,5% de los coches matriculados en España cuenten con motores de gasolina.
De ellos, algunos no pueden consumir otra gasolina que no sea de este octanaje. Debido a la composición de los diferentes combustibles, no todos los bloques son capaces de admitir la alternancia entre gasolina de 98 octanos y la de 95. Eliminar de las gasolineras “la de 95” supondría la inutilización de una cantidad ingente de coches difícilmente justificable.