Un superdeportivo de lujo ardiendo no es algo que se vea todos los días. Y menos si hablamos de un Lamborghini Huracan, cuyo precio se estima en algo más de 230.000 euros. Todo comenzó en una gasolinera de St. Louis, en Estados Unidos. El propietario de este modelo decidió parar a repostar tras participar en el Goldrush Rally.
El dueño del Lamborghini Huracan iba acompañado de un amigo, el cual conducía un Gallardo Spyder. Aparcaron sus vehículos junto a los surtidores y entraron en la tienda de la gasolinera a pagar. En ese momento vieron una bola de fuego que les hizo salir corriendo a cubierto. Y se encontraron con una escena desoladora.
Un Lamborghini Huracan reducido a cenizas
A través de una publicación en Instagram, el propietario del otro Lamborghini que acompañaba al calcinado (un Gallardo Spyder ) ha dado su versión se la situación. “Estaba intentando pagar por mi gasolina cuando la tarjeta dio error, por lo que volvimos dentro. Tan pronto como entramos en ella, vimos una bola de fuego masiva por la ventana. Corrimos los dos fuera de la gasolinera, al otro lado de la calle“, relata.
“No sabíamos qué había pasado o cuál era el coche que estaba ardiendo. Llamamos a emergencias y cuando el fuego se apagó pudimos ver el coche completamente calcinado. El nuestro, afortunadamente, solo estaba cubierto de cenizas”, explica en su texto.
¿Cómo pudo arder el coche?
la historia no acaba ahí. Tal y como explica, un testigo avisó a la Policía de que había visto todo el suceso; y, de hecho, lo tenía grabado. Al ver los dos superdeportivos decidió tomar imágenes para enseñárselas a sus amigos. En la grabación, se veía a un hombre que salió de la gasolinera sin retirar la manguera del surtidor del depósito. En cuanto el combustible rozó la zona del motor del Lamborghini Huracan, este prendió. Ya ha sido detenido.
Aparte de la pena por ver calcinada una maravilla de la fábrica italiana, lo bueno de la historia es que no hay que lamentar heridos. Que se produjera una combustión de tal magnitud en una gasolinera podría haber terminado en tragedia. Afortunadamente, el único que ha lamentado daños materiales ha sido el propietario de este coche…