Ford continúa colaborando con las principales ciudades del mundo para solucionar los problemas de circulación, y ayudar así a la gente a desplazarse de una manera más sencilla. La compañía, ha anunciado su acuerdo con Chariot para ampliar sus soluciones de transporte en los centro urbanos.
Además, Ford también ha querido formar un nuevo equipo de de ‘Soluciones Urbanas’, de forma que puedan trabajar en colaboración con las ciudades de todo el mundo en sus necesidades de transporte.
En la actualidad, la mitad de la población del mundo vive en ciudades. Conforme crece la población de las urbes, los retos asociados al desplazamiento de personas y mercancías son cada vez mayores. Así, Ford se compromete a contribuir con nuevas medidas, ya que para 2030 se espera que la población en ciudades crezca un 60%.
“Estamos expandiendo nuestro negocio para ser una empresa de automóviles y una empresa de movilidad. Colaborar con las ciudades en sus necesidades de movilidad, tanto presentes como futuras, es nuestro siguiente gran paso”, afirma Mark Fields, presidente y consejero delegado de Ford.
“Durante más de 100 años, Ford ha formado parte de la comunidad y una fuente de confianza en materia de transporte mediante automoción. Ahora, queremos trabajar con las comunidades para ofrecerles aún más opciones de transporte y soluciones para las próximas décadas“, concluyó.
Chariot comenzó a operar en 2014 y cuenta con casi 100 unidades de Ford Transit que recorren 28 rutas en la zona de la bahía de San Francisco. En un futuro, se espera que sincronicen de manera dinámica, utilizando algoritmos de datos para establecer rutas eficientes que sirvan mejor a las necesidades en tiempo real de las comunidades.
De este modo, Ford y Motivate -empresa líder global en materia de bikesharing– están trabajando con responsables del ayuntamiento de la ciudad para añadir nuevas estaciones e incrementar el número de bicicletas a 7.000 unidades en la zona de la bahía de aquí a finales de 2018.
Por tanto, Ford planea desarrollar tecnologías que permitan utilizar datos recogidos de las bicicletas para construir una red de movilidad interconectada. Esto podría incluir el uso de datos en tiempo real, tales como las condiciones meteorológicas, los patrones de uso y la disponibilidad de bicicletas para optimizar los desplazamientos.
