Zenzic ha creado una hoja de ruta para la inserción de la conducción autónoma en el Reino Unido que acabaría, entre otras, con las señales de tráfico.
Zenzic, organización vinculada al desarrollo del vehículo autónomo en el Reino Unido, ha realizado un estudio en que señala que las señales de tráfico se podrían comenzar a retirar a partir de 2027, un proceso que concluiría en 2030 dejando las carreteas “desnudas” de señales.
El estudio se denomina ‘Hoja de ruta para la conducción conectada y automatización de las carreteras en el Reino Unido en 2030’ y en este traza el plan que han de seguir fabricantes y Gobierno para crear un espacio en el que los vehículos puedan implementar de forma progresiva las tecnologías de conducción autónoma al tiempo que desarrollan los protocolos de comunicación entre vehículos y vías para que no sea necesaria la intervención humana en la circulación.
Importancia de la tecnología
Para lograrlo será de gran importancia la llegada de la conexión 5G al tiempo que Zenzic ya está trabajando la creación de nuevos protocolos para la comunicación entre el vehículo la carretera, una información que contendrá todas las incidencias que pueda haber en la vía.
Si han señalado el 2027 como el momento en el que se podrían empezar a retirar las primeras señales no es por casualidad pues han comenzado a trabajar en algunos plazos. En los próximos cinco años (2024) pretenden mapear todas las carreteras del Reino Unido así como sus infraestructuras mientras que en el 2029 esperan haber desarrollado respuestas de seguridad para todo tipo de situaciones de peligro en carretera.
Las primeras pruebas piloto no deberían tardar en llegar y esperan que el Gobierno facilite el trabajo para poder desarrollar este tipo de test al tiempo que cumplan con la hoja de ruta que también han diseñado para ellos.
¿Y los veteranos?
Han previsto que los vehículos puedan actualizar su software (el programa informático que controla el sistema) para que estén siempre a la última. Sin embargo, ¿y los coches más veteranos que no cuenten con el software? Ahí es donde radica uno de los principales problemas de este proyecto pues muchos millones de conductores comprarán su coche antes de 2027 y lo seguirán teniendo en 2030 cuando hayan desaparecido las señales de tráfico.
Desde Zenzic apuntan a que el Gobierno y los fabricantes deberían dar facilidades para instalar kit tecnológicos que permitan a los vehículos más veteranos contar con estas tecnologías y no quedar atrás en esta revolución en la circulación. Sin embargo, la mayoría de los vehículos que hoy están a la venta no solo no carecen de algún sistema de conducción autónoma sino que no tienen previsto introducirla en los próximos años.