Los españoles queremos renovar nuestros coches, pero no podemos. El motivo, por supuesto, es económico. Y es que, aunque nos fijemos en la mecánica o el diseño estético de un vehículo a la hora de comprarlo, el dinero a desembolsar sigue siendo clave. 8 de cada 10 encuestados por Rastreator.com así lo afirman.
La peor época de la crisis ya es pasado; aunque todavía se noten algunos coletazos. Nuestra economía doméstica no es boyante. Por eso muchos ciudadanos se enfrentan a una triste realidad: no tienen forma de comprar un nuevo coche. Y echan de menos el Plan PIVE.
¿Qué fue el Plan PIVE?
Un 84% de los ciudadanos encuestados afirma que sería necesario volver a activar estas ayudas. Hablamos de las subvenciones estateles que el gobierno puso en marcha para incentivar la compra de vehículos nuevos hace unos años. Y ahora se vuelven a reclamar en un momento en el que se pide que el parque automovilístico español se renueve; no es que no se quiera cambiar de coche, es que no se puede.
Y es que, si ya de por si el sector ha registrado unos buenos datos en los primeros seis meses de 2018, estos podría ser todavía mejores si se reactivara el Plan PIVE. Entre enero y junio se ha producido un aumento de más del 10% respecto a las matriculaciones registradas en el mismo período de 2017. Pero el dato podría ser aún mejor.
Las alternativas a la compra de un coche
Sin embargo, aunque no podamos comprar un coche nuevo, hay otras alternativas si se necesita urgentemente un vehículo. Por ejemplo, comprar un coche de ocasión o seminuevo; algo que un 55% está dispuesto hacer. Eso sí, son los jóvenes (entre 18 y 24 años) los más dispuestos a ello. Por contra, la cifra se reduce entre los 55 y los 65 años. Cabe señalar que el renting y el leasing entre particulares empiezan a ganar protagonismo en estos casos.