El desarrollo de los coches autónomos está definiendo una nueva era en el sector del automóvil. Cada vez son más las marcas que centran sus esfuerzos en la fabricación de estos vehículos y aportan avances y mejoras que podrían cambiar los sistemas de transporte y movilidad convencionales.
Según los datos de PWC, estos coches automatizados tendrán una gran presencia en todas las carreteras del mundo en los próximos años. Estipulan que, aproximadamente, podrían existir más de 7 millones de aquí a 2025, por lo que es fundamental conocer cuál es la opinión real de los ciudadanos sobre esta nueva forma de trasladarse.
Conoce cómo funciona un coche autónomo en 5 claves
De esta labor se han encargado en OpenText, con un estudio denominado “Una mirada al futuro de la Inteligencia Artificial”. En él, han intentado averiguar cómo perciben los españoles la llegada de este tipo de vehículos a las carreteras nacionales… y el resultado no es del todo favorable.
Conforme detallan en su análisis, casi la mitad de los españoles (un 46%) estarían incómodos al circular en un coche autónomo como pasajeros. Algo que no es de extrañar, a la luz de los recientes acontecimientos que se han producido en torno a este tipo de automóviles. Por ejemplo, el atropello mortal de una mujer en Estados Unidos o el accidente en el que estuvo relacionado el Model X de Tesla.
Los datos también establecen que el 55% de la población española no cree que los coches autónomos hagan más seguras las carreteras. Es decir, no confía en uno de los principales argumentos aportados por las empresas que fabrican estos coches. No obstante, cabe destacar que si nos fijamos en los informes que aportan desde la National Highway Traffic Safety Administration norteamericana, veremos que los modelos autopilotados de Tesla, por ejemplo, han tenido muy buenos resultados en cuestiones de seguridad, presentando un 40% menos de siniestros que los vehículos convencionales.
OpenText ha descubierto que el 44% de los españoles no contempla que los coches autónomos lleguen a tener más presencia que los convencionales en nuestras carreteras a corto y medio plazo. Piensan que estos vehículos podrían frustrar a los conductores humanos y aseguran que todavía tienen un largo camino por recorrer mejorando los sistemas de seguridad.
Sin embargo, existe un 33% de españoles que opina justamente lo contrario. Estiman una media de 10 a 15 años para que se produzca este cambio en el parque nacional de vehículos e, incluso, un 10% de ellos piensa en este supuesto como una realidad en los próximos cinco años.