Hace unos días nos hacíamos eco de la última ocurrencia de la DGT en su lucha contra el manejo del teléfono móvil al volante y del uso correcto del cinturón de seguridad, mediante unas furgonetas blancas que ya circulan por nuestras carreteras, que se suma a la instalación de nuevas cámaras de vigilancia durante la pandemia por el Covid-19 y a la sustitución de radares fijos por radares de tramo. Sin embargo, el último sobresalto de los conductores ha tenido que ver con un ‘error’ en la notificación de unas multas.
El pasado 10 de junio la DGT envió la notificación de una multa al correo electrónico de miles de conductores de nuestro país por el que se les indicaba que se dirigieran a su espacio personal de la plataforma de la Dirección General de Tráfico donde se les daría más información sobre esta sanción.
En la misma les facilitaban el teléfono 060 para recibir más consultar cualquier duda sobre el asunto.
En realidad no había tal multa. Al acceder a la plataforma los usuarios solo encontraban ‘Prueba’ en el asunto sin ninguna información añadida. Se trataba de una prueba de envío de notificaciones de multas algo que en lugar de hacerlo entre los propios desarrolladores informáticos de la aplicación o con un número limitado de usuarios previamente avisados, lo hicieron con un grupo amplio, desinformado y en el que cundió el susto (son muchas las reacciones que se pueden encontrar en las redes sociales sobre esta incidencia).
La DGT ya ha informado de que se trata de un error técnico y a los notificados les ha indicado que no den mayor importancia a este aviso. Además, se ha disculpado por las molestias que hayan podido provocar.
Y es que, en pleno confinamiento, con los problemas económicos que esto ha supuesto para muchas familias, recibir una multa no es una cuestión que genere demasiadas alegrías.
Algún usuario, en sus redes sociales, apuntaba a que había temido que “para una vez que cogía el coche durante el confinamiento, le ponían una multa”.