Tras su aprobación inicia y posterior bloqueo de Alemania, la Comisión Europea ha decidido ceder e incluir a los combustibles sintéticos en el paquete climático de 2035.
Lo que parecía iba a convertirse en todo un culebrón ha terminado por terminar antes de lo previsto. Y es que tras la decisión de prohibir la venta de coches de combustión en 2035, la Unión Europa congeló su aprobación tras el bloqueo efectuado por Alemania e Italia al pedir que los e-fuels formasen parte del mismo. Dicho y hecho ya que los Veintisiete acaban de aprobar el acuerdo que será incluido como punto sin discusión en el orden del día del Consejo de ministros de Energía de mañana, lo que, en la práctica, supone dar luz verde a la nueva norma y someterlo al voto de los ministros para su formalización.
“Hemos llegado a un acuerdo con Alemania sobre el uso futuro de combustibles sintéticos en los automóviles”, ha anunciado el vicepresidente de la Comisión Europea para el Pacto Verde Europeo, Frans Timmermans, en su cuenta de Twitter. No obstante, dicha petición mantiene todavía el rechazo de Polonia e Italia a lo que se sumaría la abstención de Bulgaria, pero dado que Alemania ha dado el ‘sí’ a la Comisión Europea, este grupo de países deja de tener peso suficiente para bloquear el acuerdo. Desde Europa defienden que este encaje de los combustibles sintéticos no afectará al acuerdo cerrado ya entre el Parlamento Europeo y los Veintisiete en cuanto a la prohibición de comercializar los vehículos de combustión en la UE a partir de 2035, mientras que fuentes diplomáticas subrayan que lo importante ahora es evitar que este tipo de maniobras debiliten el funcionamiento de las instituciones europeas, ya que esta es la verdadera preocupación.
Ahora solo falta ver cómo se las ingeniará la Comunidad Europea para meter a los combustibles sintéticos dentro de este marco siendo la opción más factible la de crear una nueva categoría específica para e-fuels para que así, por mucho que sean motores de combustión, no queden fuera ya que en teoría se les consideraría combustibles libres de carbono. Tal y como ha comentado en su cuenta de Twitter el ministro alemán de Transportes, Volker Wissing, impulsor del cambio, “los vehículos con motor de combustión interna podrán seguir matriculándose después de 2035 si repostan exclusivamente con combustibles neutros en emisiones de CO2. Europa sigue siendo tecnológicamente neutral”. Un gran paso para que la UE impulse en esta legislatura el paquete climático de leyes con el cual quiere reducir al menos en un 55% las emisiones contaminantes del bloque en el horizonte de 2030 y respecto a las de 1990.