La libre circulación por todo el país a partir del domingo hace temer a la DGT un repunte de la siniestralidad.
Pere Navarro, director de la DGT, ha reconocido que la entidad que él dirige y que es la responsable del buen funcionamiento de las carreteras, vive con incertidumbre el regreso a la normalidad el próximo 21 de junio tras el fin del Estado de Alarma por el posible aumento de los accidentes de tráfico.
Así lo ha reconocido en la jornada organizada por el Centro de Estudio Ponle Freno-AXA sobre el impacto de la desescalada en la Seguridad Vial. En este reconoció que España fue uno de los países en los que más se redujo la movilidad y la circulación de vehículos durante el confinamiento por la pandemia del Covid-19, aunque apunta a que los accidentes han regresado a nuestras carreteras a medida que se han ido superando fases de la ‘desescalada’ postconfinamiento.
El alcohol, el gran enemigo
Una vez más, Pere Navarro volvió a referirse al alcohol como el gran enemigo de la conducción. Apuntó a que son muchos los reencuentros y celebraciones que se están haciendo entre amigos y familiares tras muchas semanas sin verse algo que ha llevado a la conducción imprudente y a conducir bajo los efectos del alcohol.
A esto suma la falta de uso del cinturón de seguridad, algo que refrendó diciendo que no se lo ponen “porque no les da la gana”. Por ello, Navarro señaló que es el momento de volver a controlar con toda la firmeza posible la seguridad en la carretera para evitar el mayor número de accidentes posibles y alejar del volante a quienes no estén en condiciones de conducir.
Junto a estas valoraciones, el director de la DGT apuntó a que durante el Estado de Alarma, ha habido pocos accidentes, estos han llegado con el paso de fases de la desescalada tras el confinamiento. Así, los principales accidentes han sido por salida de la vía, un punto en el que ha intervenido el exceso de velocidad, al mismo tiempo que han aumentado los accidentes de camiones.
La visión de los expertos
En esta misma jornada participaron algunos expertos como Josep Alfonso, director del Centro de Estudio Ponle Freno-AXA, organizador de la jornada, el cual indicó que “es momento de extremar las medidas de seguridad” pues la habilidad de la conducción no es la misma. Y recalcó que uno de los enemigos de los conductores ahora es el “deseo de libertad”, lo que podría hacer “que se baje la guardia”.
Ramón Ledesma, asesor de Pons Seguridad Vial e impulsor del carné por puntos en nuestro país quiso destacar el aumento del uso de vehículos de uso urbano y capaces de alcanzar velocidades de entre 20 y 40 km/h, los cuales también están experimentando un aumento en la accidentabilidad y que ya ha generado algunos fallecidos. Es tal el problema que ve en el uso indiscriminado de este tipo de vehículos que cree que en 2025 podrían suponer el 50 % de las víctimas mortales solo en Madrid.
Francisco Alonso, director del Instituto Universitario de Investigación en Tráfico y Seguridad Vial (Intras) indicó que hasta un tercio de los conductores están afectados por problemas de sueño y ansiedad, algo que muchos intentan combatir con el uso de fármacos, una disposición que afecta a la capacidad de conducir.
Además, durante la ponencia también se puso el foco en el transporte público, revelando en torno al 15 % de los usuarios habituales lo han abandonado y han regresado a sus vehículos particulares. Aunque, el hecho de que muchos trabajadores se mantengan con el teletrabajo también permitirá que haya menos vehículos en las carreteras y, por tanto, menos masificaciones en las horas punta.