Las furgonetas camufladas fueron la gran novedad en la Campaña Especial de Tráfico de la DGT para este verano, aunque se tiene constancia de que ya existían desde hace al menos un año. Incluso la cifra de vehículos comerciales que han desempeñado estas labores han variado pues desde la Tráfico informaron que había 15 unidades mientras que Social Drive, la aplicación en la que los usuarios registran las incidencias que se encuentran en las carreteras, radares incluidos, han encontrado alguna furgoneta camuflada más. Ahora la propia DGT descubre cómo son estas furgonetas camufladas.
Son el principal arma que la entidad dirigida por Pere Navarro está utilizando durante la campaña especial que inició el pasado lunes 14 de septiembre y que durará hasta el domingo 20 en el que se persiguen las distracciones al volante, especialmente las relativas al uso del teléfono móvil.
Son furgonetas que no tienen ningún tipo de distintivo que le identifique como vehículo de la Guardia Civil de Tráfico y, solo en algunos casos, cuenta con matrícula especial PGC, la correspondiente al parque móvil de la Benemérita.
Según señala la propia DGT, las distracciones al volante estuvieron detrás del 29 % de las víctimas mortales en nuestras carreteras el año pasado (un total de 359) superando de este modo al exceso de velocidad o a la conducción bajo los efectos del alcohol, que habían liderado esta clasificación en años anteriores.
Es por ello que se están haciendo campañas especiales a nivel estatal para su control, a la que se están sumando los ayuntamientos, aunque parece que este problema no se erradica. Un estudio relativo a las distracciones elaborado por el RACE señala que hasta el 96 % de los conductores ha confesado haber utilizado alguna vez el móvil mientras conducía, mientras que hasta el 80 % apunta que lo hace de forma habitual.
Pero no solo se utiliza para hablar por le manos libres pues el 76 % señala que lo manipula en actividades como escribir mensajes o mirar redes sociales (un 12 % de forma habitual).
Pero no solo apuntan al móvil en nuestras distracciones en la carretera (multiplica por cuatro el riesgo de accidente), también se refieren al sueño y la fatiga pues reduce nuestra atención y capacidad de respuesta; así como fumar (aumenta un 50 % de posibilidades de tener una colisión) pues apuntan a que en esos 4 segundos que se tarda en encender un cigarro de media se recorren 113 metros circulando a una velocidad de 100 km/h.
Son muchas las recomendaciones que se pueden hacer para evitar las distracciones al volante y no solo está la de apagar el teléfono móvil o ponerlo en modo avión, en modo coche aquellos que lo tengan, para que no nos molesten mientras conducimos o que no tengamos la tentación de cogerlo. Estos son los consejos que nos dan desde Tráfico:
La Ley de Seguridad Vial considera la distracción al volante como una infracción grave y la penaliza con 200 euros de multa y una resta de 3 puntos del carné de conducir. Sin embargo, el uso del teléfono móvil al volante está en el punto de mira de Pere Navarro desde hace tiempo y son varias las veces que se ha estudiado y pedido el cambio de esta sanción. Los últimos rumores apuntan a que la multa podría subir a los 300 euros y la pérdida de puntos a 6.
También se considera distracción el uso de navegadores y demás sistemas electrónicos así como el uso de auriculares u otros dispositivos que resten sonoridad a cuanto ocurre en la carretera.