El niño de 9 años estaba conduciendo y apenas podía ver por encima del volante.
Los hechos tuvieron lugar la noche del pasado jueves. Una patrulla de la Policía Local de Sitges (Barcelona) detectó un vehículo que circulaba por un barrio de la localidad pero en el que no eran capaces de ver a la persona que estaba al volante, mientras que su acompañante, una mujer de mediana edad, sí que se le podía divisar. Al dar el alto al coche encontraron que era un niño de 9 años el que estaba conduciendo.
El pequeño, que apenas podía ver por encima del volante, estaba acompañado de su madre, de 40 años de edad y nacionalidad lituana, y su hermano menor, un bebé de tres meses, que estaba sentado en una sillita infantil.
Denuncia a la madre
Ante tales hechos, los policías procedieron a denunciar a la madre, pues al niño por edad aún no se le puede acusar de delito alguno, por ser su tutora legal, la responsable del vehículo y por dejarle conducir cuando aún no tiene edad para ello. En España situada a los 18 años coincidiendo con la mayoría de edad, por si a alguien se le ha olvidado.
Se le han abierto diligencias por ser la responsable de un delito contra la Seguridad Vial. Y se ha dado conocimiento a la Fiscalía de Menores de los hechos por si quisiera actuar contra la madre y estudiar la situación en la que se encuentran los hijos. El asunto podría ser más grave de lo que parece.
La excusa de la madre fue la de que el niño quería conducir. Por ello, aprovecharon que había poca gente en la calle para realizarlo sin poner en peligro a nadie. No era consciente de que los primeros puestos en peligro eran ellos. Unos hechos que se agravan por la presencia de un recién nacido de apenas 3 meses en los asientos de atrás. El pequeño tardará mucho tiempo en recibir su próxima clase práctica de conducción.