Caída de ventas y la posibilidad de contagios en las fábricas son los principales temores.
Los primeros efectos de la crisis del coronavirus ya se están notando en el sector de la automoción y la fabricación de coches. La primera consecuencia directa afecta especialmente a los países más afectados por el brote del virus: China, Corea del Sur e Italia. En ellos las fuertes medidas de cuarentena aplicadas por las autoridades ha obligado a cerrar a la mayoría de concesionarios, por los que las ventas en el último mes se han desplomado.
El coronavirus supone una losa (una más) para los fabricantes de coches, que ya les estaba costando crecer por el fantasma de una nueva recesión económica a nivel mundial, o la guerra comercial entre Estados Unidos y China. Hace unos días, la Agencia Moody’s pronosticó una caída del mercado del 2,5% a nivel global debido a la crisis del coronavirus.
China: fabricas y concesionarios cerrados
En el país más afectado y origen de la epidemia, China, la situación es catastrófica. Los expertos cifran una caída de las ventas del 92% con respecto al inicio de la crisis. La mayoría de concesionarios han estado cerrados en la última semana y los pocos que han permanecido abiertos no han recibido clientes por las medidas del cuarentena y el miedo. En Italia, el país europeo con más casos positivos, la bajada se cifra en más de un 8% en el último mes.
La logística y el transporte de piezas, de un centro de producción a otro, no se presta con normalidad. Por eso, fabricantes como PSA, Nissan u Honda mantienen cerradas su plantas de producción en el país asiático. No sólo el riesgo de contagio es causa, también la falta de suministros y las dificultades de logística para que una cadena de producción funcione con normalidad. Por su parte, Tesla también ha reconocido que la actividad de su Gigafactoría china sigue sin desarrollarse correctamente, tras el cierre preventivo de la planta de Shanghai durante cinco días en febrero.
Europa: medidas de prevención
En el continente europeo no se ha llegado aún a cierres masivos de empresas y concesionarios, salvo en zonas puntuales del norte de Italia (Ferrari, por ejemplo, ha cerrado su museo de Maranello). Pero se siguen cancelando eventos de presentación de las marcas y el Salón de Ginebra ha decidido no celebrar su edición 2020.
Así, la mayoría de las presentaciones de nuevos coches han tenido lugar en lugares con aforo limitado o directamente vía streaming. En cuanto a las fábricas y sedes de los grandes grupos de automoción, se están llevando a cada labores informativas y de prevención entre los empleados para evitar contagios: limpiar y desinfectar zonas comunes, lavarse caras y manos y evitar zonas con grandes aglomeraciones.
¿Es posible contagiarse en un coche?
Entre las informaciones, muchas de ellas falsas, publicadas en los últimos días sobre cómo se contagia el coronavirus, está la de hacerlo tocando algún objeto en el que previamente haya tocado o estornudado una persona infectada. Entre esos objetos podría estar un coche. Pero la Organización Mundial de la Salud ha desmentido que el virus pueda contagiarse a través de objetos.
Sólo habría una pequeña posibilidad de contagio, pero es muy baja, si el infectado deja secreciones nasales o bucales en el objeto y otra persona entra en contacto con ellas poco después. La OMS incide en que el coronavirus sólo se transmite de persona a persona, en distancias muy cortas y entrando en contacto con manos, ojos, boca y sus fluidos. Así que, más que tocar o no tocar un coche, hay que ser precavidos con el contacto físico con personas enfermas o evitar viajar a zonas con brotes importantes.