Los creadores de esta batería que carga en solo 15 segundos aseguran que es viable.
Era cuestión de tiempo, de tener paciencia y esperar. Los fabricantes de coches eléctricos siempre han puesto como ejemplo la evolución del teléfono móvil para entender cómo sería la evolución de los coches eléctricos. Solo había que esperar y tener paciencia para ver cómo aumentaría su autonomía y reducirían el tiempo de carga. En el primero de los casos ya se pueden encontrar modelos medianamente accesibles con una autonomía superior a los 500 km. Ahora han diseñado una batería que se cargaría en solo 15 segundos. Menos de lo que se tarda en repostar un vehículo con motor térmico.
Con esta combinación desaparecerían los principales temores de los interesados en adquirir un coche eléctrico: el de quedarse tirado en la carretera, pues podría estar varios días sin enchufarlo, y el del tiempo que tarda en cargarse, pues si hoy día se tardan horas en cargar un coche con esta solo tardaría un suspiro en lograrlo. El tercer de los problemas que los interesados exponen es el del escaso número de puntos de carga disponibles. Pero hay varios proyectos que involucran a administraciones y empresas privadas destinados a aumentar su presencia en nuestras calles y carreteras.
Esta batería es un proyecto llamado SuperBattery. Y sus ideólogos aseguran que es totalmente viable. Que se puede fabricar en cadena. Quien está detrás de este trabajo es una compañía con mucho peso en la industria como Skeleton Technologies que la habría desarrollado en colaboración con el instituto de tecnología de Karlsrune, de Alemania.
Batería de grafeno
Uno de los trucos de esta nueva batería estaría en el material del que está compuesta. Según han indicado sus creadores la base sería de carbono de grafeno curvo, mientras que las que se emplean en la mayoría de los eléctricos hoy a la venta son de ión-litio.
Además, apuntan a que se podría recargar varios cientos de miles de veces gracias a unos nuevos ultracapacitadores, algo que no se consigue con las actualmente empleadas que, además, tienen limitado el número de veces que se puede utilizar el ciclo de carga rápida pues se pierden las propiedades de esta. El abuso de este método produce una menor autonomía de la batería aunque esta esté cargada del todo.
Este sistema ya está patentado por sus creadores, aunque por el momento no se hayan prodigado en la creación de estas baterías. Y el movimiento podría estar bien orientado pues Tesla, la marca de moda de vehículos eléctricos, ya se habría hecho con la compañía de ultracapacitadores Maxwell Technologies para afinar los procesos de carga de sus baterías.