Incluso para los conductores más experimentados, las lluvias torrenciales pueden transformar rápidamente un trayecto cómodo en uno lleno de estrés conforme la carretera que tiene por delante una visibilidad cada vez más escasa.
Los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más frecuentes en toda Europa. Así, los vehículos de Ford incorporan ahora una tecnología de luces susceptibles a la meteorología que mejoran la visibilidad de manera automática cuando empieza a llover.
Un estudio realizado en Reino Unido muestra que las cifras relativas de accidentes pueden aumentar en hasta un 82% cuando está lloviendo . El estudio también destaca que, desde el punto de vista del conductor, cuando los niveles de lluvia se sitúan por encima de las marcas viales de la carretera, incluso las que son reflectantes pueden desaparecer por el destello de los faros.
De este modo, el nuevo sistema de Ford garantiza un haz de luz más corto y más ancho que ilumina mejor a ciclistas y peatones a los lados de la carretera, y que reduce los destellos para los coches que vienen de frente. Esta tecnología, se activaría a través de la actividad del limpiaparabrisas, de las condiciones de luz ambiental y de la velocidad de conducción.
Por su parte, el Sistema de Faros Frontales Adaptativos de Ford se encarga del ángulo y la intensidad del haz de luz del faro para que este se ajuste al entorno de conducción. Por ejemplo un haz más largo y recto que permita una mejor visibilidad en las autopistas, o dirigiendo la luz a la curva cuando se está girando en carreteras comarcales.