Ambos SUV lideran las ventas de su segmento y han actualizado recientemente la gama de motores gasolina para satisfacer su alta demanda.
Ninguno de estos dos SUV superventas necesita apenas presentación. Menos en el caso del Nissan Qashqai, que durante años ha dominado, y sigue dominando, la tabla de ventas en nuestro país.
Y precisamente uno de los que más en aprietos está poniendo su reinado es su rival, el SEAT Ateca, el primer SUV de la firma española (el Qashqai va por su segunda generación), lanzado en 2016 y con una excelente aceptación en el mercado patrio. Entonces, ¿por qué comparamos dos todocaminos maduros y asentados? La razón se esconde bajo sus capós.
Para hacer frente a las nuevas normativas anticontaminación y, seamos realistas, también a la creciente demanda de motores a gasolina a todos los niveles, tanto Nissan como SEAT han actualizado el catálogo de mecánicas, introduciendo potencias medias que, como ahora veremos, se convertirán en algunas de las más deseadas de sus gamas.
Dame gasolina
El mercado se ha vuelto un poco loco y la tendencia a demonizar las motorizaciones de gasolina ha revertido, de modo que ahora este combustible marca el ritmo. Así las cosas, los japoneses tiran de sinergias y emplean el mismo bloque 1.3 turbo de cuatro cilindros que podemos encontrar en un Renault Scénic o en un Mercedes-Benz Clase A, en esta ocasión con 160 CV de potencia.
El mismo movimiento ha realizado el SEAT Ateca, que ha incorporado a su gama el bloque EcoTSI de 150 CV, algo más grande, de 1,5 litros, presente en otros modelos del Grupo Volkswagen.
Motores similares, pero sensaciones diferentes
A pesar de su similitud, devuelven sensaciones bien diferentes. El pequeño 1.3 del nipón se muestra, desde el principio, más voluntarioso, no tanto por la diferencia (casi inapreciable) de potencia, sobre todo por un par máximo superior (270 frente a 250 Nm) que mueve con más soltura la carrocería.
El TSI parece siempre más apagado, especialmente si acudimos a la opción Eco del selector de modos de conducción, que capa aún más su respuesta. Y eso que, datos en mano, el SEAT Ateca es notablemente más rápido.
Buena culpa de ello reside en la caja de cambios, una automática DSG de doble embrague con siete marchas. Bien por rapidez y suavidad, mal por cómo apura por abajo el cuentavueltas en busca de un bajo consumo, a costa de obligar al conductor a pisar en exceso el acelerador para que entienda que necesitamos respuesta. Esto no pasa en el Nissan Qashqai, cuya transmisión DCT, también automática de doble embrague y siete relaciones, goza de un tacto más natural y directo.
Y no creas que esa obsesión del Ateca por el gasto se materializa en una media real inferior a su rival: ambos firman 7,5 l/100 km en recorrido mixto. Atendiendo a sensaciones, el conjunto mecánico del Nissan me parece más agradable en términos generales, salvo por refinamiento, apartado en el que gana el evolucionado TSI del Ateca con cierta comodidad.
Buenas maneras
En cuanto a chasis, es justo lo contrario: el Ateca es definitivamente el más dinámico de su clase, con una puesta a punto envidiable que no se aleja por sensaciones de un compacto, como el León.
Vira ágil y plano, del mismo modo que ofrece un elevado confort, aunque no tan elevado como el Qashqai, menos enfocado al paso por curva (aunque tampoco se desenvuelva mal) y más a una comodidad que solo queda algo emborronada por un aislamiento acústico que podría ser superior.
Son, en todo caso, grandes rodadores aptos para uso cotidiano y largos trayectos. No tan deseable es el resultado en conducción off-road, para la que no están preparados si vamos más allá de pistas sencillas. Aquí sí hay una gran diferencia. Y es que mientras el Ateca sí ofrece una variante 4×4 de su Ateca TSI 150 CV, la tracción total no está disponible para ninguna versión de gasolina de la gama Qashqai, ni siquiera para este DIG-T de 160 CV, el más capaz de su oferta.
Última tecnología
Por lo demás, son bastante parecidos, incluso tecnológicamente, sobre todo ahora que el Qashqai acaba de renovarse y ofrece elementos tan avanzados como la conducción semi-autónoma: un control de velocidad de crucero adaptativo conjugado con el asistente activo de carril, de serie en el acabado Tekna.
Algo más austero es el Ateca Xcellence, que deja en opción muchos de los elementos de serie en su rival. Sea como sea, puede equipar un multimedia más avanzado e intuitivo o la tan de moda instrumentación digital, no disponible en el Nissan.
Para terminar, la calidad de ambos está a la altura de lo esperado, algo mejor en el Ateca, que presenta un diseño más sobrio pero también más ergonómico. Hablando de habitabilidad, el SEAT Ateca se lleva el premio, pues en un envase un punto más compacto es capaz de ofrecer buen espacio a sus ocupantes y un maletero mayor: 510 litros frente a solo 430.
Fotos: Paloma Soria.
Ficha técnica del SEAT Ateca Xcellence 1.5 EcoTSI 150 CV DSG-7
TIPO DE MOTOR | Gasolina, 4 cilindros en línea, turboalimentado |
CILINDRADA | 1.498 cc |
POTENCIA | 150 CV entre 5.000 y 6.000 rpm |
PAR MÁXIMO | 250 Nm entre 1.500 y 3.500 rpm |
V. MÁXIMA | 198 km/h |
ACELERACIÓN | 8,6 s (0 a 100 km/h) |
CONSUMO | 5,7 l/100 km (mixto) |
MEDIDAS | 4.363 / 1.841 / 1.601 mm |
NEUMÁTICOS | 215 / 50 R18 |
PESO EN VACÍO | 1.370 kg |
MALETERO | 510 l |
PRECIO | 31.570 € |
GAMA DESDE | 22.060 € |
CUOTA RENTING | 405 €/mes* |
LANZAMIENTO | Febrero de 2019 |
*Importe aproximado para 4 años y 25.000 km anuales.
Equipamiento del SEAT Ateca Xcellence 1.5 EcoTSI 150 CV DSG-7
DE SERIE: frenada de emergencia automática; control de velocidad de crucero; asistente de mantenimiento de carril; asistente de luz de carretera; lector de señales de tráfico; asistente de arranque en pendiente; selector de modos de conducción; iluminación LED; sensores de luz y lluvia; sensores de parking traseros; climatizador bizona; sistema multimedia con pantalla táctil de 8 pulgadas; navegador; Bluetooth; entrada y arranque sin llave; freno de estacionamiento eléctrico y llantas de aleación de 18 pulgadas.
OPCIONES: Pintura metalizada negro Mágico (572 €); llantas Performance de 18 pulgadas (416 €); tapicería en piel marrón (831 €); SEAT Full Link (177 €); cámara de visión 360º (572 €); sistema de navegación Plus (385 €); cuadro de mandos digital (364 €); control de velocidad de crucero adaptativo (187 €); detector de ángulo muerto + avisador por tráfico trasero cruzado (395 €); portón de apertura manos libres (509 €); asiento del conductor eléctrico (312 €); techo panorámico eléctrico (1.143 €) y sistema de sonido Beats Audio (457 €).
Ficha técnica del Nissan Qashqai Tekna DIG-T 160 CV DCT
TIPO DE MOTOR | Gasolina, 4 cilindros en línea, turboalimentado |
CILINDRADA | 1.332 cc |
POTENCIA | 160 CV a 5.500 rpm |
PAR MÁXIMO | 270 Nm entre 1.800 y 3.250 rpm |
V. MÁXIMA | 198 km/h |
ACELERACIÓN | 9,9 s (0 a 100 km/h) |
CONSUMO | 5,8 l / 100 km |
MEDIDAS | 4.394 / 1.806 / 1.590 mm |
NEUMÁTICOS | 225 / 45 R 19 |
PESO EN VACÍO | 1.390 kg |
MALETERO | 430 l |
PRECIO | 33.950 € |
GAMA DESDE | 23.300 € |
CUOTA RENTING | 470 €/mes* |
LANZAMIENTO | Febrero de 2019 |
*Importe aproximado para 4 años y 25.000 km anuales.
Equipamiento del Nissan Qashqai Tekna DIG-T 160 CV DCT
DE SERIE: frenada de emergencia automática con detector de peatones; control de velocidad de crucero adaptativo; asistente de mantenimiento de carril; detector de ángulo muerto; avisador por tráfico trasero cruzado; asistente de luz de carretera; lector de señales de tráfico; asistente de arranque en pendiente; iluminación LED; sensores de luz y lluvia; sensores de parking delanteros y traseros; aparcamiento semi-autónomo; cámara de visión 360º; climatizador bizona; sistema multimedia con pantalla táctil de 7 pulgadas; navegador; Bluetooth; Apple CarPlay y Android Auto; entrada y arranque sin llave; tapicería de cuero; freno de estacionamiento eléctrico; retrovisor interior antideslumbramiento automático; luz ambiental y llantas de aleación de 19 pulgadas.
OPCIONES: pintura metalizada negro Amatista (500 €); techo solar (650 €); Dynamic Pack (900 €) y sistema de sonido Bose (600 €)