Ahora que, previsiblemente, nuestras ciudades se van a llenar de autos eléctricos, volvemos la vista a dos de los primeros utilitarios en llegar, el smart forfour y el Renault ZOE. A día de hoy, siguen conservando sus argumentos de compra intactos.
El coche eléctrico ha dejado de ser futuro para convertirse en presente. Y todo en apenas un año. No obstante, y aunque ahora las marcas se han lanzado a la carrera de comercializar este tipo de vehículos, justo es reconocer que firmas como Renault o smart llevan tiempo apostando por esta clase de propulsión. De ahí que enfrentemos a dos de las propuestas eléctricas para ciudad más consolidadas.
Aunque su destino final es la urbe, lo cierto es que nuestros invitados difícilmente podrían parecerse menos. De un lado, el Renault ZOE apuesta por la sencillez, con un diseño tradicional y limpio no carente de atractivo, pero lejos de la propuesta sofisticada del smart forfour.
Esta primera impresión se traslada al interior, pues el habitáculo del Renault ZOE lleva la sencillez a un extremo que puede resultar incluso soso. Tiene los elementos de equipamiento justos, con materiales y acabados normalitos. Incluso echamos de menos algunos huecos portaobjetos extra.
En el caso del smart forfour, la instrumentación se ha simplificado al máximo, pero no echamos nada en falta, mientras que el sistema de infoentretenimiento es bastante completo.
Repasando el habitáculo, combina mejores acabados y materiales con un diseño mejor resuelto, más sugestivo. Ofrece más información al conductor dispuesta de manera más atractiva, por ejemplo con un reloj específico para conocer en todo momento el estado de la batería.
En este apartado es donde el Renault ZOE vuelve las cosas a su favor, puesto que impone su mayor tamaño (4 metros frente a 3,5 del smart) para ofrecer mejores plazas traseras, tanto en el hueco para las piernas como en la anchura. Además, su cota en altura permite viajar a adultos de hasta 1,80 metros que en el smart forfour irán manifiestamente incómodos.
Si miramos a los maleteros, el modelo francés ofrece 338 litros frente a los apenas 185 litros del smart, que aquí paga llevar el motor en el eje trasero. A cambio, ofrece la posibilidad de tumbar la fila de asientos posterior para ganar capacidad de carga.
Las diferencias entre nuestros protagonistas continúan al pulsar el botón de arranque. En marcha, el Renault ZOE es un coche blando, lo que se agradece en ciudad porque pisa por bandas sonoras y pasos de cebra elevados con bastante suavidad. Aunque cuenta con 109 CV, frente a los 82 del smart, sus 345 kilos extra provocan que las prestaciones queden parejas.
Disponemos de modos de conducción Normal y Eco, este centrado en la regeneración de carga y que limita la velocidad máxima por debajo de 100 km/h. Sobre la autonomía, roza los 300 kilómetros reales en uso convencional, lo que otorga una libertad de movimientos notable.
Su andar en carretera es similar al de cualquier modelo de su tamaño, si bien hace más patentes los ruidos aerodinámicos porque no hay un motor de combustión que los solape.
El smart forfour es más divertido a los mandos, con una suspensión más dura que, a su vez, es un hándicap urbano. Igual que en el ZOE, podemos optar por modos Normal y Eco, posición esta en la que recarga bastante. Mejora a su rival en cuanto a rumorosidad y radio de giro, pero pierde la decisiva batalla de la autonomía, pues queda en unos 175 kilómetros que limitan moverse lejos y obligan a ir pendientes del alcance, especialmente si nos alejamos de la metrópoli.
También es cierto que, conforme apunta la marca, podría tener una batería más capaz, pero entonces sería mucho más caro. Además, smart señala que cumple con creces para la mayoría de usuarios ciudadanos.
Cargar las baterías también marca grandes diferencias, según el proceso sea mediante un cargador rápido u otro convencional.
Con el primero, en el Renault ZOE tendremos las baterías al 80 % en 1,38 horas, mientras que el smart forfour pasa del 10 al 80 % en apenas 40 minutos. A cambio, la operación se va casi a tres horas y media en una estación de carga pública o en una base de carga mural, que son aproximadamente cinco horas para el francés.
El smart forfour se apunta el último tanto cuando miramos precios, pues esta versión prime cuesta 25.474 euros, 5.000 euros menos que su rival. Ojo, porque actualmente Renault está ofreciendo un descuento de 7.500 euros que dejan la tarifa del ZOE en 23.160 euros. Eso sí, a esa cifra hay que sumaren el Renault el alquiler mensual de la batería, que arranca en 69,36 euros/mes para hacer 7.500 km al año.
También hay posibilidad de comprarla, con garantía de ocho años o 160.000 kilómetros. La del smart ofrece esos mismos ocho años, pero baja el kilometraje a 100.000.
Fotos: Paloma Soria
| Tipo de motor | Eléctrico. Síncrono de reluctancia conmutada |
| Potencia combinada | 109 CV |
| Par máximo | N.d. Nm |
| Capacidad de batería | 41 kWh |
| Autonomía eléctrica | 300 km (ciclo WLTP) |
| Velocidad máxima | 135 km/h |
| Aceleración | 11,4 s (0-100 km/h) |
| Peso en vacío | 1.545 kg |
| Maletero | 338 l. |
| Medidas | 4.084 / 1.730 / 1.562 mm |
| Neumáticos | 195 / 55 R 16 |
| Precio | 30.660 euros |
| Gama desde | 28.130 euros |
| Cuota renting | 627 € / mes* |
| Lanzamiento | Noviembre de 2018 |
*Importe aproximado para 4 años y 25.000 km anuales
De serie: Llanta de aleación 41cm (16”); control dinámico de trayectoria (ESC); sujeciones Isofix; tercer reposacabezas trasero; regulador – limitador de velocidad; ayuda al arranque en pendiente; cartografía estándar; audio con sonido 3D by Arkamys y antena DAB; vompatibilidad con Android Auto™; sistema R-Link Evolution con pantalla táctil de 7”; elevalunas traseros eléctricos; climatizador automático; luz diurna LED; sensor de lluvia y encendido automático de faros; radar trasero; ordenador de viaje; conexión USB; retrovisores reglaje eléctrico y abatibles eléctricamente; pre-climatización del habitáculo; tarjeta manos libres de apertura y arranque; asientos traseros abatibles y FlexiCharger para recarga en toma doméstica.
Opcional: Cámara de visión trasera (200 euros); personalización interior Blueberry con decoraciones interiores y tablero de a bordo en color azul y tapicería tejido Jacquard Azul (300 euros); pintura Rojo Intenso o Blanco Nacarado (535 euros); pint. metalizada Gris Titanium, Gris Highland, Morado Blueberry o Azul Eléctrico (430 euros); pintura metalizada especial (535 euros); cartografía ampliada (120 euros) y llantas de aleación de 43 cm 205/45 Tech Run (300 euros).
| Tipo de motor | Eléctrico. Síncrono de corriente trifásica de excitación independiente |
| Potencia combinada | 82 CV |
| Par máximo | n.d. Nm |
| Capacidad de batería | 17,6 kWh |
| Autonomía eléctrica | 131 km (ciclo WLTP) |
| Velocidad máxima | 130 km/h (autolimitada) |
| Aceleración | 12,7 s (0-100 km/h) |
| Peso en vacío | 1.200 kg |
| Maletero | 185 l. |
| Medidas | 3.495 / 1.665 / 1.554 mm |
| Neumáticos | 165 / 65 R 15 (del.), 185 / 60 R 15 (tras) |
| Precio | 25.474 euros |
| Gama desde | 14.525 euros |
| Cuota renting | 597 € / mes* |
| Lanzamiento | Marzo de 2017 |
*Importe aproximado para 4 años y 25.000 km anuales
De serie: Llantas de aleación de 15”; soporte de smartphone para Android Auto; asistente de frenado activo; ayuda al arranque en pendientes; cierre automático durante la marcha (Drive lock); control de velocidad Tempomat con limitador; luz de circulación diurna LED; aire acondicionado; climatizador; enchufe de 12 voltios con tapa en consola central; conexión Bluetooth con audio streaming; interfaz AUX; interfaz USB; smart Audio-System; smart cross connect para iOS y Android; cable de carga para enchufe doméstico (con bolsa) y recuperación de la energía de frenado.
Opcional: Cargador de a bordo 22kW con función de carga rápida (853 euros); paquete cable de carga (308 euros); pintura metalizada (411 euros); techo panorámico de cristal con parasol (508 euros); capota plegable (1.119 euros); llantas de 16” (102 euros); sistema de sonido JBL (611 euros); radio digital (242 euros); paquete LED & Sensor (520 euros); asistente de cambio de carril (439 euros); asistente trasero para el aparcamiento (309 euros); faros antiniebla (218 euros); paquete LED & Sensor (520 euros); retrovisor interior con oscurecimiento automático (139 euros); apoyabrazos central delantero abatible (115 euros); Pack de Invierno (593 euros); cristales traseros tintados en negro (194 euros); parrilla del radiador en blanco, plata o amarillo (73 euros); paquete Cool & Media (859 euros); sistema de alarma antirrobo (345 euros) y paquete fumador (30 euros).