Cuando compramos un coche buscamos el máximo equipamiento por el menor precio posible, un equilibrio no siempre fácil de lograr. Uno de los elementos que siempre gusta tener, aunque para ello haya que recurrir a los acabados más altos de la gama, es la cámara de visión trasera que te permite ver todo cuanto hay detrás del vehículo. Permite controlar en todo momento algunas maniobras como el aparcamiento, evitando así esos pequeños roces o golpes que son más habituales de los que nos gustaría.
Te mostramos los 10 vehículos más baratos del mercado con cámara de visión trasera.
Texto: Carlos Pascual
El comercial polivalente Ford Tourneo Courier puede equipar en su nivel Titanium la cámara de visión trasera por 500 euros extra. Se trata de un vehículo polivalente que se disputa el mercado de los familiares junto con otros modelos como el Dacia Dokker o la Volkswagen Caddy en sus versiones de pasajeros.
El modelo de la firma del óvalo puede equipar motorizaciones gasolina o diésel, utilizando el motor EcoBoost de gasolina de tres cilindros y 1,0 litros de cilindrada y el 1.5 TDCi de en el apartado diésel. Sólo este último propulsor puede equipar caja de cambios automática de ocho relaciones.
La firma económica de Renault incorpora diversas facilidades de ayuda a la conducción en su versión más familiar y más equipada a la que es posible añadir la cámara de marcha atrás en su acabado Xplore por 640 euros, incluyendo los sensores de proximidad traseros.
El monovolumen de la marca rumana ofrece un gran espacio de maletero con cinco plazas aprovechables y una versión con siete asientos. Entre sus motorizaciones cuenta con una motorización de gasolina con 130 CV de potencia y otra diésel con 115 CV, ambos con filtro de partículas.
El Toyota Yaris es un veterano del mercado ahora solo con un conjunto híbrido en oferta lo que le garantiza la etiqueta «ECO» de la DGT. Este incorpora la cámara de visión trasera de serie. En el mercado se disputa las ventas con modelos como el Ford Fiesta, el Peugeot 208, el Opel Corsa o el Kia Rio.
Su oferta comercial destaca por la incorporación de paquetes cerrados de equipamiento, lo que permite un elevado número de elementos de equipamiento de serie. Entre ellos cuenta con asistente de cambio involuntario de carril o la mencionada cámara de marcha atrás.
El SUV más compacto del fabricante alemán cuenta desde el acabado básico con la posibilidad de equipar el asistente a aparcamiento y la cámara trasera por 600 euros. Con este paquete también se incluyen los sensores de aparcamiento delanteros y traseros.
El Opel Crossland X es uno de los monovolúmenes más pequeños del mercado, con cierto aspecto crossover. Este se fabrica sobre la plataforma del Peugeot 2008, un modelo de apariencia más tecnológica, aunque pueden equipar elementos semejantes como el control de guiado en el carril o la frenada automática de emergencia.
El utilitario francés ya apareció en el listado de automóviles con parkassist más económicos del mercado. Ahora repite nombramiento al poder disponer de cámara de visión trasera en su acabado Zen la cual llega junto a los sensores de proximidad.
El Renualt Clio presentó hace unos meses su nueva generación a principios de verano, aunque todavía se comercializa su predecesor. En cualquier caso, la nueva generación incorporará un equipamiento mayor y más tecnológico, destacando sus asistentes a la conducción aunque aún no tenemos precios de este nuevo modelo.
El utilitario de la firma coreana incorpora de serie la cámara de marcha atrás para facilitar el aparcamiento de serie. Su alto nivel de equipamiento de partida es una de las apuestas de la marca coreana para lograr el éxito en el mercado.. Este encuentra su homólogo en el Hyundai i20 que también puede disfrutar de este equipamiento aunque por un precio ligeramente superior.
En su gama podemos encontrar tres niveles de potencia con 84, 100 y 120 CV. El primero de ellos con un propulsor atmosférico de cuatro cilindros de 1,2 litros y los dos últimos parten de un bloque tricilindrico sobrealimentado mediante turbocompresor.
El utilitario de Skoda incorpora de serie la cámara de visión trasera en su acabado Style. También está disponible con el acabado MonteCarlo que enfatiza su carácter deportivo.
El urbano de la firma checa del grupo Volkswagen ofrece un gran nivel de equipamiento con elementos como asientos calefactados o acceso y arranque sin llave. Su motorización principal es el propulsor de 1,0 litros de cilindrada, con tres cilindros y sobrealimentado mediante turbocompresor. Este desarrolla en este modelo 95 CV.
El utilitario alemán incorpora un abanico muy amplio de posibilidades de equipamiento, entre ellas la cámara de marcha atrás. Esta se ofrece como opcional con un sobrecoste de 275 euros y a partir del acabado Advance, no estando disponible en modelos más básicos, como es el acabado Edition.
Comparte plataforma con otros vehículos del grupo como el SEAT Ibiza, el Volkswagen T-Cross o el SEAT Arona, modelos que representan la vanguardia tecnológica entre los segmentos compactos y urbanos.
El Peugeot 208 estrena generación en este verano, aunque todavía está en venta la versión de cinco puertas de su predecesor. Cuenta con las últimas unidades con las que este equipamiento se incluye de serie.
Sus motorizaciones de gasolina recurren a un bloque de tres cilindros y 1,2 litros de cilindrada con diferentes niveles de potencia: 82, 100 y 120 CV.
El utilitario de la marca alemana aún a la venta a la espera de la llegada de la nueva generación, incorpora cámara de visión trasera con el equipamiento de serie, sin sobrecoste alguno.