Inaccesibles en la mayor parte de los casos, los principales presidentes y jefes de estado más importantes del mundo se mueven en auténticas fortalezas rodantes. Vehículos de lujo en su mayoría y dotados tanto de las mejores prestaciones como de las medidas de seguridad más efectivas. Estos son los coches de los mandatarios más poderosos del mundo en la actualidad.
Donald Trump (Estados Unidos)
Comenzamos fuerte con el presidente de los Estados Unidos, porque hace poco más de un año estrenó su super limusina, expresamente fabricada y personalizada por General Motors. Es una mezcla entre el Cadillac Escalade y sedán CT6. El coste total del vehículo se estima en 15 millones de euros. Cuenta con un blindaje resistente a ataques químicos y puertas con un grosor de 20 cm.
Vladimir Putin (Rusia)
Al igual que Trump, el presidente de Rusia gusta de ostentar con sus vehículos y apuesta también por la industria de su país. Hace poco ha estrenado un nuevo Aurus Senat, una especie de Rolls Royce Phantom pero a la rusa. Tiene un motor V12 de 860 CV y blindaje especial. El propio Putin lo conduce a veces.
Xi Jinping (China)
El presidente y líder del partido comunista de China usa dos modelos de la marca nacional Hongqi. Uno de ellos es el L5, un sedán de lujo, valorado en 710.000 euros y pesa cerca de las tres toneladas, por lo que suponemos que el blindaje debe ser muy especial. Para otros viajes utiliza un Hongqi N501, una limusina con acabados muy exclusivos y blindaje especial.
Emmanuel Macron (Francia)
Algo menos lujosos son los coches utilizados por el presidente de la República. El gobierno galo adquirió en 2017 un DS7 Crossback personalizado para el presidente y otro SUV de gran tamaño, un Peugeot 5008, para sus desplazamientos por territorio francés y otros países.
Boris Johnson (Reino Unido)
El Primer Ministro británico ha heredado el coche oficial de su antecesora, Theresa May. Se trata de un Jaguar XJ Sentinel especialmente preparado para evitar ataques de todo tipo. Tiene blindaje en los bajos y suministro de oxígeno propio en caso de sufrir un ataque químico. Está valorado en 345.000 euros.
Angela Merkel (Alemania)
Merkel pone su granito de arena para apoyar la potente industria automovilística de su país, llevando a sus reuniones coches de fabricación alemana, sobre todo Audi y Mercedes. Pero en los últimos meses suele lucir un Mercedes-Benz Clase S Guard, también blindado y con un amplio espacio interior.
Giuseppe Conte (Italia)
Uno de los mandatarios más aficionados a la automoción. Tiene como propiedad un Jaguar Xj6 de 1996 y color rojo. Aunque para sus desplazamientos diarios utiliza este Volkswagen Passat de última generación y color gris. No obstante, en algunos encuentros más formales viaja en una limusina Lancia propiedad del estado italiano.
Shinzo Abe (Japón)
El hombre con más poder de Japón tras el Emperador apuesta por coches de producción nacional, como no podía ser menos. En los últimos meses lo hemos visto salir y entrar de reuniones con un Lexus LS600h, tecnología híbrida y lujo en un sólo coche.
Jair Bolsonaro (Brasil)
El controvertido mandatario brasileño no lo es tanto para elegir coche. Su vehículo diario es un Ford Fusion, una berlina muy popular en Brasil, con acabado Titanium (valorado en 20.000 euros) y pintura negra, posiblemente a prueba de bombas. Así, el precio final del coche puede ser mucho mayor que el estándar del mercado.
Tayyip Erdogan (Turquía)
El presidente de Turquía también gusta moverse en coches de lujo y especialmente cómodos. Su modelo habitual es este lujoso Mercedes Clase S con lunas tintadas y blindaje, que hasta el mismo Erdogan conduce a veces.
Mohamed bin Salmán (Arabia Saudí)
Subimos el nivel porque la familiar real saudí le sobra presupuesto para tener varios coches y además totalmente personalizados. El príncipe heredero, bin Salmán, que también es viceprimer ministro del país, tiene en propiedad varios coches espectaculares, como un Lamborghini Aventador con pintura color oro. Pero en los últimos meses ha cambiado por un vehículo más amplio y, digamos, más práctico: este Rolls Royce Phantom Coupé, bañado en oro, cómo no.
Alberto Fernández (Argentina)
El recién elegido presidente de Argentina ya ha hecho sus primeros desfiles con este Toyota Camry, aunque de color blanco. Y se le ha visto varias veces al volante del mismo.
Scott Morrison (Australia)
No son los mejores tiempos para el primer ministro australiano, Scott Morrison. La devastadora catástrofe natural de los incendios que asolan el país lo han vuelto a poner en el blanco de las críticas por su gestión. En estos tristes pero frenéticos días se la podido ver a bordo de un BMW Serie 7 reforzado por la división especial de seguridad de la marca alemana.
Pedro Sánchez (España)
Antes de ser presidente, Pedro Sánchez se movía en un Peugeot 407 de su propiedad. Pero tras su llegada a la Moncloa ha cambiado el atractivo sedán francés por el lujo y eficiencia alemanes del Audi A8 L de batalla larga. Cuenta con blindaje VR9, uno de los más efectivos en lo que respecta a la protección de vehículos oficiales. Está valorado en medio millón de euros y es propiedad del parque móvil del Estado.
Narendra Modi (India)
Uno de los hombres más fuertes de toda Asia, el primer ministro indio, posee este BMW 760 Li de 2012, en su edición especial High Security. Esto quiere decir que está protegido de impactos de balas, con un fuerte blindaje de nivel 7. Este blindaje, sin embargo, no está reñido con la comodidad y la avanzada tecnología de su interior.
Andrés Manuel López Obrador (México)
El presidente de México, no muy dado a los lujos, realiza sus desplazamientos en este Volkswagen Jetta blanco GL Team, del año 2013. No suele conducirlo y siempre va acompañado en él por su chófer, su mujer o su jefe de prensa.
Benjamín Netanyahu (Israel)
El primer ministro israelí también eligió el Mercedes-Benz Clase S, posiblemente el modelo más elegido por los mandatarios a nivel mundial, para sus viajes oficiales y agenda diaria. Cuenta con el acabado más lujoso y es de color negro.
Mark Rutte (Países Bajos)
Mark Rutte es un político peculiar. No duda en acercarse en bici a trabajar, como muchos de sus conciudadanos, pero luego, en sus ratos libres, es un apasionado del automóvil que no duda en darse una vuelta con su Saab 93 de 1999. Para sus desplazamientos oficiales, sin embargo, opta por un BMW Serie 5 de última generación.
Papa Francisco (El Vaticano)
Aunque de un estado minúsculo, el Papa es otro jefe de estado y uno de los más influyentes del mundo occidental. Además, no podemos perder la ocasión de mostrar su nuevo Papamóvil: un Dacia Duster personalizado con la parte de atrás acristalada para que el pontífice pueda saludar a los fieles en sus visitas.
Kim Jong-Un (Corea del Norte)
Por último, no podíamos cerrar esta galería sin descubrir el coche que más usa el enemigo número 1 del mundo occidental: Kim Jong-Un. El líder norcoreano se mueve, junto a su séquito de guardias de seguridad, con una limusina Mercedes-Benz S 600 Pullman Guard. Un vehículo no exento de polémica, porque Daimler ya dejó claro en su momento que no sabe de dónde salieron esas limusinas. La excusa era necesaria debido a las sanciones económicas de la ONU impuestas al régimen comunista, entre las que se incluye la prohibición de vender productos de lujo al estado norcoreano.