Un reciente estudio ha concluido que los coches conectados ayudarán a salvar nada menos que 11.000 vidas y evitar 26.000 accidentes cada año para el 2025.
El informe La movilidad sostenible del futuro y su impacto sobre los ODS, presentado en el marco del III Observatorio de la Movilidad Sostenible de España, señala que más de 51 millones de vehículos conectados, con 5G o Inteligencia Artificial (IA), están operativos hoy en día a nivel mundial. Con la constante evolución en sistemas de asistencia y conectividad que están experimentando los automóviles, los vehículos conectados serán capaces de salvar 11.000 vidas y evitar 260.000 accidentes cada año según un informe elaborado por Grant Thornton en colaboración con Fundación Ibercaja y Mobility City.
Los automóviles conectados están desarrollando nuevas funcionalidades que permitirán asistir mejor en caso de emergencia, recopilar información útil sobre el estado de la carretera y del entorno, así como conseguir una mayor seguridad y una conducción más eficiente. Para 2025 se espera que haya más de 500 millones de vehículos conectados en circulación y que para 2030 los servicios de vehículos conectados alcancen un valor de 75.000 millones de euros, lo que convierte el mercado de los vehículos conectados en una de las áreas de mayor crecimiento en el Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) y ofrece oportunidades de ingresos para la industria de la automoción y empresas del ecosistema.
El coche autónomo también se sitúa como otra de las disrupciones en el sector de la movilidad y se estima que en diez años el 40% del kilometraje por carretera lo podrán llevar a cabo vehículos de estas características ahorrando también 400.000 toneladas de dióxido de carbono (CO2) a lo que se sumarán 280 millones de horas de conducción. Sin embargo, todavía los desafíos son “elevados”, no por el desarrollo de la tecnología, sino por el rediseño de las ciudades, la instalación de sensores y radares o la necesidad de un marco legal que regule esta nueva realidad.
Por otro lado, el impulso de la movilidad sostenible es “crucial” para alcanzar el objetivo 2030 de reducción del 23% de las emisiones de CO2 respecto del 1990 establecida en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (Pniec) y para alcanzar la descarbonización total del transporte en 2050. Como apunta el Observatorio, en la actualidad circulan 180.000 vehículos eléctricos en España, mientras que el objetivo marcado por el Pniec es que en 2030 lo hagan cinco millones de automóviles, un 16% del total del parque de vehículos de ese año. Además, se estima que el transporte de pasajeros en las ciudades crecerá entre un 60% y un 70% para 2050.
Durante el primer semestre de 2021, las ventas de automóviles eléctricos de pasajeros aumentaron un 140% con respecto al mismo período de 2019, lo que supone un 7% del total de las ventas de vehículos a nivel mundial. Por otra parte, la flota global de autobuses de ‘cero emisiones’ aumentó desde 2019 un 22%. En España, este tipo de vehículos suponen en la actualidad el 3% de las matriculaciones totales de turismos. Para aumentarlas, el país debe hacer frente a los siguientes retos: la autonomía de las baterías, la mejora y el registro oficial de la red de infraestructuras y las barreras administrativas que retrasan la concesión de permisos y licencias.