Todos estamos encantados del futuro que nos auguran los coches autónomos. La posibilidad de movernos en uno de estos vehículos inteligentes se ha convertido en una realidad más cercana de lo que imaginábamos; y eso que, hace unos años, era pura ciencia ficción.
Pero, como todo, la seguridad en todo lo que envuelve a los coches autónomos sigue dando quebraderos de cabeza. Y no solo en lo que a accidentes y problemas en la conducción se refiere. Y es que, como bien ha advertido el presidente ejecutivo de Blackberry, John Chen, este tipo de automóviles son susceptibles de sufrir un hackeo.
En declaraciones al medio The Telegraph, Chen ha afirmado que los coches autónomos poseen más líneas de código que un avión de combate típico. A su juicio, los piratas informáticos podrían causar estragos si consiguen hackear uno de ellos. Para el directivo, este tipo de vehículos son “armas completamente cargadas”.
En el mismo medio, el directivo también habla del nuevo proyecto de su compañía. Así, hemos sabido que Blackberry está desarrollando tecnologías de autoconducción en colaboración con Baidu, el gigante chino de búsqueda de Internet (su Google, para entendernos). Y precisamente por trabajar en este campo se siente con la suficiente autoridad para dar la voz de alarma sobre el tema.
“Un automóvil podría infectarse fácilmente con virus [y] es literalmente un arma completamente cargada. Si los hackers pueden controlarlo, puedes imaginar lo que podrían hacer (…) Yo puedo crear un automóvil que creo que está libre de virus en un 90%; pero tan pronto como salga a la carretera y esté en uso, esas condiciones deben revisarse regularmente”, prosigue John Chen.
Según su punto de vista, aún quedan más de cinco años para que los coches autónomos comiencen a circular; y el motivo no es otro que los problemas de seguridad que pueden surgir y en los que las empresas deberán trabajar mano a mano con las autoridades. “La regulación y la tecnología de seguridad y protección deben establecerse mucho antes de que alguien permita que los automóviles (autónomos) circulen. Los coches sin conductor todavía tienen muchos errores humanos y falta de control de seguridad”, finaliza.