Vaya por delante que, con un buen mantenimiento, pasarás la revisión sin problema. Sin embargo, los últimos cambios introducidos en la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) no deben ser obviados. Sobre todo si tu coche es diésel, vehículos para los cuales se han endurecido los requisitos.
Todos los vehículos dentro de la normativa Euro 5 y Euro 6 (matriculados a partir de 2011) se inspeccionarán con nuevos requisitos. Tal y como afirman en La Vanguardia, la mayoría de las modificaciones de la normativa de la ITV iban destinadas a combatir los altos niveles de emisiones. No olvidemos que es un verdadero problema de salud en algunas grandes ciudades españolas debido a los altos niveles de contaminación.
Nuevas pautas para el diésel
Para empezar, las ITV inspeccionarán las centralitas de los vehículos. Así, lo primero que harán es ver si se ha incorporado de fábrica algún software que modifique los niveles de emisiones. También se prestará especial atención a los filtros de partículas (por si han sido modificados o retirados); y a si se han manipulado las válvulas EGR. Estas son, principalmente, las cosas que se mirarán con lupa en los diésel.
Eso sí, también hay que prestar atención al estado actual del parque automovilístico español. Por unas causas u otras, en nuestro país los coches son, de media, más viejos que en el resto de la Unión Europea. Los coches deben acudir de forma periódica a la ITV. Esto supone un incremento de los costes de la prueba. En 2017, se realizaron en España más de 20,2 millones de inspecciones; una cifra que aumenta un 3,6% respecto el año anterior.
No hay de qué preocuparse
Desde las administraciones se ha intentado tranquilizar a los propietarios de estos vehículos. Ellos adquirieron un coche diésel totalmente legal. Si se ha cuidado de forma adecuada la mecánica del coche, no habrá ningún problema. Además, hacen hincapié en que, si se es propietario de un coche ecológico, no hay de qué preocuparse; las ITV y los técnicos ya están trabajando para adaptarse a ellos.
