Hablamos, por ejemplo, del Citroën C-Aircross Concept visto en Ginebra y que se construye sobre la base del Citroën C3.
En el concepto pudimos ver detalles a destacar, como sus puertas traseras de apertura inversa y unas llantas de 22 pulgadas.
El habitáculo, que no se muestra en los recientes ”teasers”, presentaba en su prototipo una configuración muy espartana y espacio para cuatro personas.
Ahora llegan con un par de recreaciones por ordenador, muy similares en cuanto a diseño al prototipo que vimos en su día. Todo apunta a que el modelo definitivo, el de producción en serie, estará en el Salón de Shanghái 2017 (abril).
El nombre con el que nos veremos en el mercado podría ser Citroën C5 Aircross. Este SUV muestra lo que vendría a quedar en la gama por encima del Citroën C4 Aircross.
En el desarrollo de este modelo, el grupo francés ha contado con la colaboración de Dongfeng, socio con el que trabaja mano a mano en el mercado chino.
Aún falta mucha información oficial, pero ya hay quién anuncia que se ha construido sobre la plataforma EMP2, la misma que la que encontramos en otros modelos como el Peugeot 3008 de nueva generación.
Se espera que el Citroën C5 Aircross utilice los motores PureTech del Grupo PSA, además ofrecer la nueva caja de cambios automática de ocho velocidades “EAT8”.
Tampoco se descarta una posible versión híbrida, ya que en el pasado concepto se dejó ver con un sistema de propulsión híbrida enchufable que desarrollaba 313 CV.
El precio de este modelo, que primero se destinará a los concesionarios surcoreanos estará entre los 28.711 y los 43.750 euros. La llegada a los mercados europeos está prevista para el año 2020.