Las cámaras de Madrid Central se han desconectado por lo que no habrá impedimento para la libre circulación de vehículos por la zona centro de la capital.
José Luis Martínez Almeida tomó posesión del bastón de mando de la alcaldía de Madrid el pasado 15 de junio gracias a los votos de Partido Popular, Ciudadanos y Vox. Y su primera decisión cumplir con una de sus promesas electorales, cesar el funcionamiento de Madrid Central. Así, partir de hoy, 1 de julio no se multará por la entrada irregular en la zona centro de Madrid.
Había sido su principal caballo de batalla contra Manuela Carmena (anterior alcaldesa) durante la campaña, desde la oposición se criticó duramente el funcionamiento de esta medida y no fueron pocos los vídeos que realizó el nuevo Martínez Almeida durante la campaña mostrando los atascos que se vivían en las calles del centro a causa de Madrid Central.
No es un cese de Madrid Central
El cese de Madrid Central no es una derogación definitiva de la medida sino una moratoria de su actividad. Esto se traduce en que se detendrá la actividad de las cámaras que vigilan los accesos y se dejará de multar a quien entre en esta zona, hasta ahora de bajas emisiones. No se ha comunicado la fecha en la que finalizará esta moratoria aunque los rumores apuntan a que será el 1 de septiembre cuando se tome una decisión definitiva sobre este área.
A partir de ahora, se iniciará una ronda de contactos con los afectados, incluyendo a las asociaciones de empresarios (quienes tendrían preparado una serie de informes sobre despidos y pérdidas de jornadas de trabajo que han sufrido a consecuencia de Madrid Central, según aludió el alcalde). El objetivo es tomar una decisión conjunta sobre la continuidad de este área de bajas emisiones.
El nuevo consistorio defiende su postura aludiendo a que esta decisión ha sido un “fracaso total”. A esto añade que “los datos objetivos son que en el primer trimestre del año 2019, con Madrid Central ya en vigor, se han producido los peores datos que la media de los ocho años anteriores”.
Sin embargo, no ha hecho referencia a los registros de emisiones extraídos a partir del 1 de mayo cuando comenzaron a imponerse multas a quienes no utilizaron de forma correcta este área de acceso restringido para vehículos con motores térmicos contaminantes.
De hecho, Ecologistas en Acción ya ha señalado que “la media mensual de CO2 en mayo fue el más bajo de su historia”. Comienza de esta manera la guerra de las estadísticas y de los intereses que sustentan cada una.
Apoyo de la ciudadanía
La moratoria del funcionamiento de Madrid Central ha conllevado las críticas de la nueva oposición, de los ciudadanos y de parte de los empresarios que tienen sus negocios en la zona afectada.
Así, el pasado sábado 29 de junio tuvo lugar una manifestación en la Gran Vía de Madrid a la que acudieron miles de personas solicitando la continuidad de la restricción de acceso a este área al mismo tiempo que hay empresarios de la zona que han iniciado una campaña de apoyo a Madrid Central poniendo pegatinas en sus escaparates.
No hay que olvidar, que en las últimas elecciones, el Partido Popular fue la segunda fuerza más votada, por detrás de Más Madrid, liderado por Manuela Carmena. Logró la alcaldía tras lograr el apoyo de Ciudadanos y Vox. Sin embargo, analizando los resultados electorales en los barrios afectados encontramos que en Centro, Más Madrid logró el 49 % de los votos, y que en Lavapiés, se hizo con el 39 %.
No hay miedo a una multa por parte de Europa
Uno de los puntos que más polémica pueden suscitar de este cese de actividad de Madrid Central es la multa que planeaba sobre Madrid y que ahora vuelve a estar presente. Esta estaba originada en el incumplimiento de la normativa europea de reducción de emisiones y descarbonización del aire que data de 2010, algo de lo que ya fue advertida la ciudad (y España) a finales de 2018 y que recordó Albert Rivera hace unas semanas.
Ante esto, el nuevo alcalde de Madrid, Martínez Almeida, señaló que “la Unión Europea demanda medidas efectivas y no necesariamente tiene que ser Madrid Central”. Sin embargo, aún no ha indicado cuáles serían las medidas alternativas que habría planificado junto a sus socios de gobierno.
Adiós a los semáforos de la A-5
Otra de las medidas que ya ha puesto en vigor el nuevo equipo de Gobierno de la capital es el cese de actividad de los semáforos que la anterior regidora instaló en la A-5 en el acceso de Madrid. Según señaló la portavoz de la alcaldía, “han sido completamente inútiles y han creado más atascos”. Apunta a que manejan unas estadísticas que revelan que el tráfico en hora punta se ha ralentizado en 10 minutos.
Tienen previsto realizar un estudio sobre movilidad en la zona. Entre ellos se incluye un posible soterramiento de la A-5 en su tramo del Paseo de Extremadura.