Este puente, los conductores de Galicia y varias zonas de Castilla y León pueden llevarse una sorpresa. Y es que la Dirección General de Tráfico (DGT) ha escogido estos lugares como banco de pruebas de su nueva iniciativa. Se trata del uso de camiones y furgonetas camufladas para controlar las imprudencias que se puedan cometer al volante. Estos vehículos, por supuesto, circulan sin ningún distintivo oficial que permita su identificación.
El uso de camiones camuflados u otros modelos de coches comerciales responde a una necesidad de altura. Desde ellos, gracias al ángulo, es mucho más fácil controlar qué pasa dentro del habitáculo del vehículos cuando este está en marcha. La idea, originaria de Reino Unido, está aún en fase de pruebas; si todo va bien, se extenderá al resto de España próximamente. Su éxito se avala en que, en el país británico, se ha conseguido cazar a más de 4.000 conductores cometiendo infracciones al volante en los dos años que lleva aplicándose esta iniciativa.
Las imprudencias que se vigilan
Desde estos camiones y furgonetas camufladas se vigila, principalmente, que no se uso el teléfono móvil mientras se está conduciendo. Hablar por este aparato y mandar o leer mensajes son comportamientos todavía muy comunes en nuestras carreteras. De hecho, según datos de la DGT, las distracciones al volante -en la que la primera que destaca es el uso de los smartphone– es la principal causa de accidente mortal en nuestra carreteras. Muy por delante del exceso de velocidad y el consumo de alcohol.
Cabe señalar que, tras la vuelta de Pere Navarro al puesto de director de la DGT, se viene haciendo hincapié desde el organismo en que el uso del teléfono es un peligro al volante. Paralelamente al aumento del control en carreteras, se está trabajando en la reforma del carné por puntos; entre las novedades, un aumento de la sanción por conducir y hablar o mandar mensajes con el móvil. También, hace unas semanas, se anunció que se estudiaría que, en caso de accidente causado por el uso del smartphone, el conductor pagara los daños causados, no su seguro.