BMW Serie 8 Gran Coupé, deportividad y lujo ahora para todos

El BMW Serie 8 Gran Coupé se posiciona como al cuarta propuesta de la berlina deportiva tras el Coupé y el Cabrio.

La berlina deportiva alemana muestra su tercera variante de carrocería, a la que nosotros tuvimos acceso hace unas semanas. Tras la llegada del BMW Serie 8 Coupé y BMW Serie 8 Cabrio, y las variantes BMW M8, le llega el turno al BMW Serie 8 Gran Coupé lo que se traduce en la incorporación de dos puertas de acceso a los asientos traseros y una mayor distancia entre ejes para una mayor comodidad en las plazas traseras.

Ahora sí, la berlina de mayor tamaño de la firma muniquesa está preparada para acoger a cuatro personas en su interior. Pensar en un quinto integrante no es una quimera aunque sí resulta difícil hacerlo en trayectos de larga duración pues la propia bancada trasera tiene un diseño para acoger a dos personas y la misma marca apunta a que un tercer integrante solo podría realizar trayectos de corto recorrido.

Se pondrá a la venta en septiembre aunque aún no se han dado a conocer los precios. Y lo hará con una terna de cuatro motores, tres diésel y uno gasolina (incluimos más información y las fichas técnicas más adelante).

Más tamaño para más ocupantes

Para ser justos, hay que recalcar que las dos primeras variantes del modelo que llegaron también contaban con asientos traseros, aunque estos eran muy limitados en el espacio para las rodillas. Era difícil pensar en que estos pudieran ser ocupados (con cierta comodidad) por adultos. Ahora, con la llegada del BMW Serie 8 Gran Coupé esta circunstancia cambia.

El modelo se alarga hasta los 5.082 milímetros de longitud, lo que supone un aumento de 231 mm con respecto a sus hermanos. Esto se debe principalmente por la mayor distancia entre ejes, que ahora se sitúa en 3.023 mm (201 más), mientras que el ancho se establece en 1.932 milímetros (aumenta 30 mm) y la altura llega a los 1.407 milímetros (crece 61 mm).

Así, aunque los cambios también se notan en la consola y la percepción del espacio en las plazas delanteras, los principales cambios llegan a la zona de atrás. Ahora podrán entrar mejor, sin necesidad de contorsiones desde las puertas delanteras, y contarán con un mayor espacio para piernas y más aire por encima de las cabezas.

Eso sí, nuestra percepción de estas plazas cuando lo conocimos de primera mano fue que eran demasiado verticales. Consecuencias de tener un techo muy bajo en la parte posterior a pesar de todos los ajustes de diseño.

Así se presenta el nuevo BMW Serie 8 Gran Coupé

https://www.youtube.com/watch?v=uULu2qE8XME

Diseño icónico

La estética apenas sufre alteración. Las mínimas para adaptarse a los cambios de tamaño. Así, los riñones siguen gozando de gran protagonismo en el frontal, los faros de tipo led llegan de serie (en opción quedan otros de tipo láser) y apenas se ha revisado el paragolpes delantero y los pasos de rueda, ahora son algo más anchos y prominentes.

Sí se nota más en la caída del techo a partir del pilar B. Ahora es un cuatro puertas por lo que el techo tiene una bajada menos ambiciosa que en la variante coupé pero mantiene una caída de las líneas hasta unirse con la zaga que finaliza con un pequeño alerón.

En la trasera encontramos que la disposición de la luna trasera (algo mayor) es menos horizontal que en los demás modelos. A esto se suman unas líneas regulares con contornos modelados, unas colas de escape dobles y un novedoso faldón trasero.

Por su parte, la boca del maletero (440 litros) se mantiene algo angosta pues solo se eleva el capó. En ningún caso se levanta la luna trasera manteniendo así la tónica dominante de las berlinas de BMW.

Ajustes mecánicos

La respuesta de la Serie 8 de BMW está fuera de toda duda, como bien hemos podido comprobar en los últimos meses en nuestras pruebas de las variantes Coupé y Cabrio. Sin embargo, con la mayor distancia entre ejes y los nuevos pesos (gana 70 kg en conjunto), se han debido realizar algunos ajustes.

Así, se ha revisado el balance de suspensiones, de los amortiguadores, el equipo de frenos y el modo en el que se entrega la potencia. Y todo para que siga siendo un vehículo redondo en prestaciones y dinamismo, sin olvidar la parte de confort que demanda una familia.

A esto ayuda que de serie llega la suspensión adaptativa M con amortiguadores controlados electrónicamente, la dirección activa integral (de serie cuando se disponga de tracción total y opcional para las unidades de tracción trasera) para una mayor maniobrabilidad y una mejor respuesta en las curvas y estabilidad activa antibalanceo incluida en la opcional suspensión adaptativa M Professional.

En cuanto al sistema de frenado cuenta con pinzas delanteras fijas con cuatro pistones y pinzas traseras flotantes monopistón. Sin embargo, para quien requiera de más agarre habrá opciones M Sport que forman parte del paquete M Technic Sport.

Finalmente, las llantas comienzan en 18 pulgadas, un diámetro que se puede elevar hasta las 20 pulgadas.

Gama de motores

Cuatro opciones mecánicas están disponibles desde el mismo lanzamiento del modelo. Así, destaca el BMW M850i xDrive Gran Coupé, con motor V8 de gasolina, tracción total, un consumo de 10 l/100 km y unas emisiones 229 g/km de CO₂. Destila una potencia de 530 CV.

Por debajo, también con propulsor de gasolina, quedan los BMW 840i Gran Coupé y BMW 840i xDrive Gran Coupé. Cuentan con el mismo propulsor (seis cilindros en línea y 340 CV) aunque les diferencia que el primero es tracción al eje trasero y el segundo es tracción total. Los consumos quedan en 7,5 y 7,8 l/100 km respectivamente.

Finalmente, y como única opción diésel, encontramos el BMW 840d xDrive Gran Coupé. Se presenta con un motor de seis cilindros en línea, tracción total y 320 CV. Su consumo se establece en 6,3 y las emisiones en 166 g/km de CO₂.

Todos los motores están asociados una caja de cambios automática Steptronic Sport de 8 velocidades que se pueden cambiar de modo secuencial mediante unas levas situadas en la caña de la dirección.

A la última en equipamiento

El equipamiento está a la altura de lo que se espera de una marca como BMW, de lo que ya se ha visto en el resto de variantes del BMW Serie 8 y del precio que tendrá, que se espera que tenga una base por encima de los 100.000 euros.

Llega de serie con Head-Up Display, Driving Assistant, advertencia de colisión y peatones con función de frenado en ciudad, advertencia de salida de carril y de cambio de carril, información del límite de velocidad, alerta de tráfico cruzado y de colisión trasera.

A esto hay que añadir el equipamiento que se ofrecerá como opcional entre los que destaca el control de crucero activo con función Stop & Go, Driving Assistant Professional (que trae consigo el asistente de dirección y control de carril, entre otros dispositivos) y el sistema BMW Night Vision. Llama la atención que entre los detalles del Parking Assistant estándar, está la cámara de visión trasera y el asistente de marcha atrás.

Esta tecnología también se hace patente en el habitáculo gracias al nuevo sistema de pantallas que centralizarán toda la información. Así el cuadro de instrumentos alberga una pantalla de 12,3 pulgadas mientras que en el centro del salpicadero y en posición destacada encontramos un segundo monitor táctil de 10,25 pulgadas que engloba el nuevo sistema operativo BMW 7.0. Este puesto de conducción la firma de muniquesa lo denomina BMW Live Cockpit.

Cockpit Professional

Y, una vez más, el conductor interactuará con los mandos mediante los botones del volante, los propios de la pantalla, el controlador iDrive situado en la consola, mediante comandos fónicos y gestual que reconocerán los sensores del habitáculo.

Además, este reconocerá al conductor y sus preferencias adaptando elementos como la luz o el volumen de la música a sus gustos.

Fichas técnicas del BMW Serie 8 Gran Coupé

BMW 840i Gran Coupé

BMW 840i xDrive Gran Coupé

BMW M850i xDrive Gran Coupé

BMW 840d xDrive Gran Coupé