Ya tenemos otra confirmación para el Pebble Beach. BMW presentará su nueva interpretación del vehículo roadster. El BMW Z4 Concept tiene una silueta dinámica después de haber reducido el coche a lo estrictamente necesario para que el conductor pueda experimentar el placer de conducir con una libertad total sobre cuatro ruedas, según ha explicado Adrian van Hooydonk, el vicepresidente sénior de Diseño de BMW Group.
Esto se traduce en un modelo deportivo y progresivo que define la visión que desde BMW tienen sobre los roadsters modernos. “El BMW Concept Z4 expresa el nuevo lenguaje de diseño de BMW desde cualquier perspectiva y en todos los detalles. Desde el frontal dinámico hasta los impresionantes flancos, pasando por la zaga de corte limpio: unas pocas líneas y la sutil interacción entre las superficies es suficiente para generar un sentido de potencia y emoción”, ha añadido van Hooydonk.
La batalla larga, su silueta baja y estirada y su zaga compacta son los rasgos que evocan a un roadster sacado de otra época y que, al mismo tiempo, contrastan con los elementos de diseño más modernos. A comparación de los anteriores modelos de BMW, el Z4 tiene un capó más corto y los alerones definidos, lo que proporciona al conductor una sensación deportiva y ágil. Cuenta con dos prominencias que se estiran hacia atrás desde el habitáculo que cumplen la función de los arcos antivuelco, para potenciar la sensación de estabilidad que proporciona este concept.
La parte frontal tiene esculpida, de forma bien definida, una nariz de tiburón. Conserva una parrilla delantera baja y ancha, en cuyo interior se instala una malla de diseño muy elaborado que se remata con una interpretación vertical del clásico diseño de cuatro ojos de los faros, con dos tubos que se solapan a cada lado. El capó, en forma de concha, tiene aperturas de ventilación estilizadas que se curvan sobre las ruedas. Además, el faldón frontal, con sus tres entradas de aire, anuncian de forma visual el potente motor que se esconde en su interior.
Sin embargo, no consigue eclipsar a la parte trasera del vehículo. El diseño ancho y bajo de la zaga, los potentes pasos de rueda y las finas luces traseras en forma de L incrementan la postura deportiva del vehículo. La tapa del maletero cuenta con un prominente alerón que vuelve al vehículo más ágil, especialmente en los tramos rápidos. Las grandes salidas de aire del faldón trasero y el difusor de fibra de carbono añaden dinamismo a la parte de detrás del vehículo.
La pintura exterior en Energetic Orange con acabado Frozen muestra contrastes de luces y sombras en la superficie, lo que acentúa la tridimensionalidad del exterior. Las llantas de aleación de 20 pulgadas en diseño deportivo de radios dobles bicolor se funden en la carrocería, mimetizándose con ella.
En el interior se mantienen las líneas y el color de la carrocería. El asiento del conductor, los paneles de las puertas, el cuatro de instrumentos y la consola central están acabados en negro, mientras que el resto del interior lleva detalles naranja. El cuadro de instrumentos y la pantalla de información central están formados por dos pantallas ubicadas casi a la misma altura y muy cerca la una de la otra, por lo que parece que sean una sola unidad. En la pantalla de información, se puede escoger qué contenido se desea ver. Sobre el cuadro de instrumentos se erige el Head-Up Display, que muestra la información de conducción esencial a una altura que entra dentro del campo de visión directa del conductor.
Todos los controles están agrupados en islas funcionales que permiten al conductor centrarse en la experiencia de conducir. Las molduras del habitáculo también son minimalista, pero están hechas con materiales exclusivos y todos los detalles se han cuidado al milímetro, tanto por dentro como por fuera.
