Mulliner se encarga de crear los Bentley más especiales y únicos del planeta. Los técnicos especialistas se dedican a jugar con los materiales y los colores, de modo que el resultado es completamente personalizado por el cliente. Uno de los mejores ejemplos es el Bentley Continental GT V8 S Convertible que ahora conocemos, un one-off que emplea una curiosa fibra de carbono en color naranja cobre.
El naranja cobre es el color que destaca sobre la carrocería de este Continental descapotable, pues decora elementos como el capó, el contorno de la parrilla, los retrovisores y las piezas más bajas del conjunto. Destaca porque se emplea sobre una base en color “Ghost White”, un acabado también exclusivo que va a juego con los cromados que lucen las molduras laterales o las branquias laterales. Las llantas van pintadas en color negro brillante.
El habitáculo es lo más llamativo, pues aquí es donde conocemos esta fibra de carbono acabada en naranja, un material que cubre los apliques centrales del salpicadero y la consola central. No es un trabajo sencillo, pues se utiliza fibra de carbono, cobre y cable de metal para su concepción. El color, realmente, lo proporciona el cobre, que es más tarde lacado para potenciar el acabado.
El naranja se extiende también por la tapicería de cuero, que alcanza el salpicadero, detalles de los asientos y puertas. Los reposacabezas muestran orgullosos el nombre de Mulliner, el especialista encargado de dar vida a esta edición tan especial del que parece solo se fabricará esta unidad. Aunque fue creado para el pasado salón de Ginebra, es ahora cuando conocemos tos detalles de su fabricación. Eso sí, no te ilusiones ni vayas sacando la cartera, pues este Bentley Continental GT V8 S por Mulliner ya tiene afortunado dueño.