Descubrimos el nuevo Audi Q3 Sportback, un nuevo SUV Coupé que sigue la senda del Q8

El nuevo Audi Q3 Sportback supone la nueva apuesta de la firma alemana por los SUV Coupes.

Nos trasladamos hasta Manchen  para conocer en vivo y en directo al Audi Q3 Sportback, o lo que es lo mismo, la carrocería cupé del SUV que, en otras condiciones, se hubiera bautizado como Audi Q4. Aquí te descubrimos todos sus secretos.

Parece que Audi le ha cogido el gusto al segmento de los SUV cupés. El Audi Q8 fue el encargado de abrir una puerta en la que ahora se introduce, de manera muy vistosa, el Audi Q3 Sportback y en la que también entrarán a formar parte tanto el Audi e-tron Sportback como los futuribles Audi Q6 y Audi Q4 e-tron.

Denominación, esta última, que se postulaba como la más lógica para el modelo que conocimos en un hangar de Manchen, a las afueras de Ingolstadt, pero que finalmente se desechó en detrimento del apellido Sportback a causa de que esa numeración par irá a parar directamente al todocamino 100% eléctrico que ya mostró sus primeros trazos hace un par de meses a través del Audi Q4 e-tron concept.

Extra de músculo

Centrándonos en el modelo que nos ocupa, lo cierto es que los diseñadores de Audi han sabido exprimir al máximo el músculo de este Audi Q3 Sportback. De un primer vistazo parece, sin lugar a dudas, un Audi Q3 que se ha ‘machacado’ literalmente en el gimnasio.

Los paragolpes más marcados, los pasos de rueda ligeramente sobredimensionados, una línea de cintura ligeramente más baja, una parrilla singleframe con un tramado en forma de panal de abeja y, obviamente, una caída del techo más pronunciada ayudan a conseguir tal efecto.

Porque pese a denominarse como SUV Coupé, este Audi Q3 Sportback mantiene la línea impuesta por el comentado Audi Q8, con un pilar C grueso y más inclinado, pero sin llegar a ser tan exagerado como los de los BMW X4 o Mercedes-Benz GLC Coupé y acercándose un poco más al concepto impuesto en el BMW X2, con el que rivalizará directamente.

Sí, porque este Audi Q3 Sportback ofrece una longitud ligeramente mayor a la del Audi Q3, concretamente de 1,6 cm llegando así a los 4,50 metros. Esta cota, unida a los 29 mm menos de altura (1,55 m) y a la incorporación de serie de múltiples elementos del paquete S line (que pueden ser sustituidos por los pertenecientes al paquete black), le confieren un aspecto, en vivo, incomparable.

La zaga se completa con una luneta más inclinada, con un alerón superior terminado en forma de cresta y con un difusor más prominente presidido, desgraciadamente, por salidas de escape falsas. La guinda la ponen unas llantas de aleación firmadas por Audi Sport hasta de 20 pulgadas (de serie arranca con unas de 17) y una paleta de colores exclusiva con este gris Manhattan bastante llamativo.

Habitable, sin duda

En el habitáculo, la sensación de asombro es menor ya que el puesto de conducción calca, como no podía ser de otra forma, el diseño de la nueva generación del Audi Q3. Materiales de primera calidad (como el cuero, Alcántara o el aluminio pulido) que se extienden incluso por los paneles de las puertas, pantalla central táctil de 10,1 pulgadas (8,8 de serie) con un manejo intuitivo, cuadro de instrumentos digital de serie, cargador inalámbrico para smartphones… y un largo etcétera de elementos que dan forma a un salpicadero de primera.

No obstante, la gran pregunta que nos surge es si este Audi Q3 Sportback puede ser igual de confortable que su hermano ‘convencional’. Pues por lo comprobado en dicho hangar, la respuesta es positiva.

Primero, porque sus butacas mantienen tanto la inclinación de los respaldos como el desplazamiento longitudinal, aunque este pasa de los 15 a los 13 cm y, segundo, porque el maletero cubica los mismos 530 litros que el Audi Q3, dotándole de una gran practicidad, pues con la segunda fila echada completamente hacia delante, el dato aumenta hasta los 622 litros.

Cuestión de comodidad

Yendo por partes, la línea de techo más pronunciada apenas afecta a los pasajeros traseros y un adulto de 1,80 metros se situará sin problema alguno. En cuanto al maletero, las formas son igual de regulares que en el Audi Q3 aunque la boca de carga es algo más voluminosa.

Existe un compartimento para depositar la bandeja, la apertura del portón es eléctrica y con función de manos libres y, al abatir los respaldos traseros, se obtiene una capacidad total de 1.400 litros.

Habrá un motor ECO

Mecánicamente, la oferta se compone básicamente de las mismas versiones que dan forma al actual Audi Q3. Desde el arranque de su comercialización, previsto para otoño, el Audi Q3 Sportback podrá escogerse con tres motores, el gasolina Audi Q3 Sportback 45 TFSI de 230 CV o los diésel Audi Q3 Sportback 35 TDI de 150 CV y Audi Q3 Sportback 40 TDI de 190 CV.

Más adelante llegará la versión de acceso a la gama gasolina, el Audi Q3 Sportback 35 TFSI animado por un bloque de 1,5 litros, turbo que desarrolla 150 CV, 250 Nm y que se apoyará por un lado en el sistema de desconexión selectiva de cilindros y, por otro, en un sistema micro-híbrido de 48 CV que le hará valedor de la etiqueta ECO de la DGT.

Todos podrán acoplarse a la transmisión automática de siete relaciones S tronic, aunque los motores de 150 CV lo harán, de serie, a la manual de seis relaciones. Del mismo modo, la tracción total quattro será estándar en los dos más potentes.

Prometen más diversión

Si la última generación del Audi Q3 ha dado un salto cualitativo en lo que a dinámica de conducción se refiere, los responsables de Audi nos aseguran que este Audi Q3 Sportback conseguirá aumentar dichas sensaciones.

Puede que sea por la mayor pisada que se le presupone o porque han trabajado en mejorar un grado la puesta a punto del chasis, porque lo cierto es que sobre el papel, este modelo que debería haberse denominado Audi Q4 cuenta con las mismas elecciones que el Audi Q3… aunque muchas de ellas como parte del equipamiento estándar.

Entre ellas nos referimos a la dirección progresiva variable, el Audi Drive Select hasta con seis programas (entre los que se encuentra uno específico off road) o un equipo de frenos con discos delanteros de 340 mm y traseros de 310 mm.

Opcionalmente, se puede sumar una suspensión adaptativa con control de la amortiguación o un control de descenso de pendientes.

Seguro y conectado

Este Audi Q3 Sportback ofrece lo último no solo en asistentes de seguridad sino, también, en conectividad. Como complemento al sistema multimedia MMI Navegación plus, permite utilizar los servicios Car-to-X de conexión con el entorno.

Entre algunas de sus funciones se hallan la búsqueda de espacios para aparcar en la calle, la información de semáforos (el sistema recomienda la velocidad para enlazar varios semáforos en verde), la navegación mediante Google Earth o el servicio de voz Alexa basado en la nube de Amazon para conseguir información sobre eventos en curso e, incluso, realizar remotamente tareas hogareñas.

Por su parte, el listado de asistentes a la conducción se reparte entre los cuatro de serie: Audi pre-sense basic, Audi pre-sense front, alerta por cambio involuntario de carril o alerta por objetos en el ángulo muerto.

Entre sus opcionales se hallan el control de velocidad de crucero con traffic jam assist, la alerta por tráfico cruzado trasero, el reconocimiento de señales de tráfico, el asistente de aparcamiento o los faros Matrix LED (de serie son todos LED).

Tanto para conocer sus precios como para verle rodar todavía tendremos que esperar hasta comienzos del otoño, aunque Audi ya ha previsto una gama similar a la del Audi Q3 sumando, además, la versión exclusiva y ultra equipada “edition one”.

Texto: Karam el Shenawy

Audi Q3 Sportback 45 TFSI