Con un efecto positivo para los fabricantes y los clientes, la ampliación del Plan PIVE 8 sumará ventas en 2016. Esta decisión, aprobada el pasado viernes en el Consejo de Ministros, permitirá que las matriculaciones aumenten un 9 por ciento el próximo año. GANVAM, la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, estima que los cien millones de euros de presupuesto generarán una demanda de ciento veintinco mil unidades. La previsión de adquisiciones en 2016 se ha fijado en 1.120.000 unidades, cifra que se coloca muy cerca de la situación natural del mercado español, con un millón doscientas mil ventas, teniendo en cuenta la renta per cápita de la población.
Para los vendedores, estos planes de ayudas a la compra de vehículos nuevos siguen dinamizando el consumo, al menos hasta que fluya el crédito, en un mercado en el que ocho de cada diez compras se realizan mediante financiación. Además, según GANVAM, estos incentivos deberían continuar, ya que no suponen un gasto para el Estado, sino una inversión, pues, por cada euro invertido, recupera dos a través de impuestos. El Plan PIVE se inició en 2012 y, tras ocho ediciones, ha logrado achatarrar más de un millón trescientos mil coches antiguos.
Juan Antonio Sánchez Torres, presidente de GANVAM, comentó sobre la decisión del Gobierno: “Esta ampliación del Plan PIVE permitirá estabilizar este año la antigüedad del parque en el entorno de los 10,2 años”.