Tener el coche a punto en todo momento es responsabilidad del conductor, pero más cuando se acerca el temido momento de la revisión en la Inspección Técnica de Vehículos (ITV). Sin embargo, mucha gente se despreocupa hasta que llega el momento y el resultado no es satisfactorio, pues en 2015 un 18,14% de vehículos no pasaron a la primera la prueba.
En este último año, las estaciones de inspección vieron como un total de 18.757.553 vehículos pasaban por sus instalaciones, y más de tres millones tuvieron que pasar una segunda vez por algún fallo en los elementos del coche. Así pues, uno de cada cinco coches fue rechazado en un primer momento. En la segunda revisión, obligatoria para los que fueron rechazados, sólo el 6,69% volvió a no superarla.
La elevada tasa de rechazo tiene su motivo en los múltiples defectos en los automóviles, tanto leves como graves. Más de 21 millones de defectos se encontraron, siendo 6 millones catalogados como graves, imposibilitando automáticamente que un vehículo supere la inspección.
De los defectos considerados graves, los que más veces se repitieron fueron los relacionados con el alumbrado y señalización (24,5%), los ejes, ruedas, neumáticos y suspensiones (22,5%) y los frenos (15,5%).
Atendiendo al tipo de vehículos, los camiones, remolques, semirremolques y autobuses fueron los que presentaron mayores defectos (más de 2 por vehículo). Todos ellos presentaron una tasa de rechazo por encima del 25%.
Pese a la multa que conlleva el ser pillado sin pasar la ITV, muchos vehículos circulan sin pasar la revisión, concretamente entre el 15-20%. Pero no sólo se trata del estado de su bolsillo, ya que un vehículo en malas condiciones puede ocasionar un accidente e implicar a terceras personas. Los vehículos con la tasa más alta son los ciclomotores, motocicletas y furgonetas.
De acuerdo con el estudio “Contribución de la ITV a la Seguridad Vial”, realizado por el Instituto de Seguridad Vial de los Vehículos Automóviles Duque de Marino de la Universidad Carlos III de Madrid, si el porcentaje de vehículos que no fueron a las inspecciones obligatorias lo hubieran hecho, se podrían haber evitado alrededor de 7.100 accidentes.