Alfa Romeo ha cumplido con lo que se espera de una marca con tanta historia. Y ha subido el listón, siendo esto algo difícil de lograr. La firma italiana se lanza al segmento de los todocamino con el Alfa Romeo Stelvio, un modelo con un diseño atrevido y deportivo y una gama de motores potentes que ensalzan este espíritu racing.
Pero no todo es velocidad y búsqueda de prestaciones en el nuevo Stelvio. Cuenta con la última evolución de la suspensión Alfalink que además de evitar incómodos balanceos en curva, absorbe con soltura las irregularidades que pueda encontrar en asfaltos rotos y pistas forestales.
El vehículo llega con el inconfundible triángulo invertido que hace las veces de calandra y que predomina los frontales de la marca en los últimos años. Esto obliga a escorar la matrícula a la derecha, si miras el vehículo de frente. Los faros son alargados y se extienden desde una posición muy centrada y en la zona baja de las defensas encontramos dos entradas de aire simétricas que surtirán de aire al radiador.
Su línea resulta estilizada con formas suaves y hasta la zona trasera donde encontramos unos pilotos que derivan de los vistos ya en el Giulia. Ojo, no confundir este modelo con la berlina que lanzó Alfa Romeo hace un año, no es un Giulia venido a más, es un modelo que toma algunas de sus soluciones técnicas y de confort, pero es un vehículo concebido completamente diferente.
Queda con una longitud de 468 cm, una altura de 167 cm y una anchura de 216 cm. Esto hace que sea 5 cm más largo que el nuevo Audi Q5, 4 cm más largo que el nuevo Peugeot 5008, y 3 cm más largo que el BMW X3 y el Mercedes Benz GLC.
El modelo cuenta con el sistema de tracción total inteligente Q4 así que mantiene el empuje sobre el eje trasero, aunque es capaz de enviar hasta el 50 % de la fuerza al eje delantero.
El último todoterreno en llegar al segmento premium incorpora la última tecnología desarrollada por el Grupo Fiat Chrysler en cuestiones de confort y seguridad. En el interior del habitáculo podemos encontrar una doble pantalla TFT, la primera de 3,5 pulgadas o 7 pulgadas, dependiendo del acabado, situada detrás del volante y en la que dispondrás toda la información de rendimiento del vehículo. Ésta es personalizable para que te ofrezca los datos de la manera que más cómodo te resulte.
En el centro del salpicadero se ha dispuesto una nueva pantalla de 6,5 pulgadas, u 8,8 pulgadas según el acabado. Será táctil y desde aquí podrás manejar los controles y mandos del vehículo.
En cuanto a los nuevos sistemas de seguridad, al Alfalink antes referido hay que sumar el sistema de frenado integrado (IBS) que ofrece una distancia de frenado mínimas; el aviso de salida de carril; el detector de ángulo muerto (BSM) con control de cruce en la parte trasera o el control de crucero activo, que regula la velocidad automática según las condiciones de tráfico.
A esto hay que sumar el sistema DNA un programa de entrega de potencia que ofrece tres opciones: D (deportivo), N (normal) y A (ecológico).
El todocamino llega con una limitada oferta de motores que poco a poco se irá ampliando. Ya está a la venta y se puede adquirir con un propulsor gasolina 2.0 de 280 CV o un motor diésel 2.2 de 210 CV. En unos meses llegarán un segundo escalón de potencia para cada una de las mecánicas. En el caso del gasolina estará disponible también con 200 CV mientras que en el del diésel contará con 180 CV.
En cuanto a los acabados disponibles, el Alfa Romeo Stelvio llegó al mercado hace un mes con un primer acabado denominado First Edition, que estaba asociado al motor gasolina de dos litros y 280 CV. Pero poco a poco este desaparecerá para dar paso a Super (ya disponible), Stelvio (acceso a la gama) y Speciale (mayor equipamiento).
Puedes elegir entre 13 colores diferentes y 11 diseños de llantas diferentes, con tamaños que varían entre las 17 pulgadas y las 20 pulgadas. Los precios parten de 48.300 euros y llegan hasta los 62.000 euros.
El nombre no ha sido elegido al azar. Alfa Romeo ya tuvo un todoterreno en los años 50, que denominó 1900 y que tenía la figura de un Jeep. Ahora ha buscado imprimirle carácter desde el principio. Para ello ha elegido Stelvio.
Se trata del puerto montañoso más alto de Italia, y la carretera 38, que es la que lo atraviesa, cuenta con unas 75 curvas en un total de 20 kilómetros. Esta carretera sale en muchas clasificaciones como la carretera más bonita y la que mejores cualidades tiene para disfrutar de la conducción.