Hace solo unas semanas Volkswagen nos presentó su nuevo Golf 2017. Esta actualización no solo renovaba la estética del modelo, sino que también actualizaba su tecnología. Para hacer aún más interesante el compacto alemán, ahora la marca nos detalla las novedades en sus dos paquetes “R-Line”.
Aunque el cliente de un Golf escogería gustosamente un Golf R, que también se renovaba con más potencia, la sensatez a la hora de la compra predomina. Y Volkswagen busca soluciones, como un acabado estético que acerca un Golf cualquiera al mencionado R, pero sin necesidad de acudir a motores potentes. Es más, los paquetes R-Line se pueden asociar a cualquier motor.
Y no es precisamente cuestión baladí, con una gama de motores muy amplia y distinguida. A destacar un nuevo 1,5 litros “TSI” de gasolina con 150 CV, un motor revolucionario en el segmento que incorpora nuevas tecnologías como el sistema Stop/Start en movimiento en caso de escogerse con cambio automático “DSG”. Todas las carrocerías son aptas.
Volkswagen propone dos paquetes R-Line diferenciados. Uno de ellos puede ir por separado, un paquete que solo afecta a la estética exterior, con unos paragolpes más deportivos, taloneras, doble escape, un nuevo alerón de techo y nuevos logotipos. Es el más básico pero también el más llamativo y atractivo. Y el más asequible: 1.105 €.
El paquete R-Line completo suma al anterior detalles nuevos en el interior, como los asientos deportivos que pueden ir cubiertos con distintas tapicerías, un volante deportivo, pedales en acero inoxidable, un recubrimiento del techo en color negro y nuevos logotipos. El sistema multimedia también muestra la letra “R” en el arranque.
Este último y completo paquete suma también la opción de elegir entre distintas llantas de 17 y 18 pulgadas, un total por el que Volkswagen cobra 1.800 €. Ya se pueden escoger estas opciones en el nuevo Golf y, como antes comentábamos, nos evita tener que ir a por un Golf R para lucir modelito deportivo.