Rolls-Royce ha presentado la octava generación de su modelo Phantom, un vehículo que fue presentado por primera vez en 1925 y que en su octava generación llega al mercado con un propulsor V12 biturbo con una potencia de 571 CV.
Rolls-Royce Phantom VIII: fotos
[fotos id=”85422″]Como puede observarse, la estética es bastante continuista con el modelo anterior, aunque destaca la “reinterpretación” de la rejilla Pantheon Grille, realizada en acero inoxidable pulido a mano. Es un elemento destacado según Rolls-Royce, ya que afirma que por primera vez se encuentra integrada en el resto de la carrocería.
El Phantom VIII cuenta además con una nueva estructura íntegramente realizada en aluminio que ofrece una mayor ligereza del chasis junto a un 30 % más de rigidez. Asimismo, la firma también destaca la comodidad del chasis, que cuenta con suspensión neumática y sistemas de control para una sensación placentera de conducción.
La suspensión neumática realiza millones de cálculos por segundo para ajustar los amortiguadores con control eléctrico, de forma que pueda adaptarse a la aceleración de la carrocería y las ruedas. Además, en el parabrisas lleva integrada una cámara estéreo para ver lo que pasa en la carretera y ajustar la suspensión de forma proactiva a velocidades de hasta 100 km/h.
El silencio es otra de las señas de identidad de este vehículo, que incorpora lunas con doble acristalamiento de 6 mm en todo el coche, más de 130 kg de aislamiento acústico y unas juntas de aluminio más grandes para optimizar la insonorización.
A esto ayudan también los paneles separadores de la estructura y el empleo de planchas dobles de aleación en zonas del suelo, además de la inserción de capas defieltro y espuma de alta densidad entre estas planchas para lograr un mejor aislamiento. Los neumáticos también incorporan una capa de espuma especial que reduce 9 dB el ruido de las gomas.
Corazón V12 biturbo
Según la firma británica, el Phantom VIIi estrena un motor completamente nuevo y “completamente silencioso” al lograr un nivel bajo de potencia de salida a bajas revoluciones. Bajo el capó del nuevo modelo encontramos un propulsor V12 biturbo de 6,75 litros que sustituye al anterior atmosférico también V12.
Este nuevo bloque genera 571 CV y una descomunal cifra de par de 900 Nm a tan solo 1.700 rpm, lo que permite un motor poco ruidoso a baja velocidad pero capaz de generar muchísima potencia al acelerar. Viene asociado a una transmisión automática ZF de 8 velocidades.
La electrónica del Phantom es otro de os elementos a tener en cuenta, ya que la marca lo define con el vehículo tecnológicamente más avanzado de la historia de Rolls-Royce. A la pantalla HUD de alta resolución y tamaño de 7×3″ se suman el punto de acceso Wi-Fi y lo último en sistemas de navegación, multimedia y ayudas a la conducción.
Entre estos últimos, el modelo incluye Alertness Assisdtant, un sistema de cuatro cámaras que incorpora Panoramic View (visión 360 grados y vista de helicóptero) y Vision Assist (visión nocturna), además de programador de velocidad activo y sistemas de alerta como el de colisión, detección de peatones, tráfico en sentido transversal, salida y cambio de carril.
El interior
Como suele ocurrir con la marca británica, el interior busca evocar un lugar de calma y tranquilidad en el que disfrutar del camino rodeado de un interior realizado de manera artesanal con los materiales más exclusivos y modernos del mercado.
El salpicadero, de forma vertical, cuenta ahora con un enfoque más futurista y una pantalla TFT a color de 12,3 pulgadas con retroiluminación LED en el cuadro de mandos. Además de la información típica sobre velocidad, temperatura o nivel de combustible, incorpora un reloj analógico fiel a la idea de que es el ruido “más estridente en un Rolls-Royce”.
Se ha rediseñado la forma de los asientos, también realizados de forma artesanal, para que sean más cómodos. Los delanteros cuentan con un panelado de madera en la parte trasera que se inspira en el sillón Eames Lounge de 1956, un diseño muy famoso que forma parte de la exposición del MoMA de Nueva York.
En la parte trasera encontramos también mesas de picnic y monitores multimedia traseros, que pueden desplegarse a través de un botón, un mueble-bar con vasos de whisky y decantador, copas de champán o nevera.
Los asientos traseros pueden encargarse con diferentes opciones de distribución: tipo salón, asientos individuales con uso ocasional de reposabrazos, asientos individuales con consoal central fija o sillones reclinables.
