La Guardia Civil, junto a la Jefatura Provincial de Tráfico de Ciudad Real, ha logrado detener a 23 personas que se beneficiaban de forma ilegal de las bonificaciones del Plan PIVE. Los detenidos simulaban operaciones de compraventa de vehículos para poder conseguir estas subvenciones cuando, en realidad, se trataba de contratos ficticios.
Los cargos a los que tienen que hacer frente es a un delito de integración en un grupo criminal, un delito continuado de falsedad documental, otro de usurpación del estado civil y, por último, de estafa. Por tanto, no solo realizaban estos contratos de forma fraudulenta sino que además utilizaban nombres de personas que no les habían otorgado su consentimiento
Así actuaban
Un Centro Autorizado de Tratamiento de Vehículos (CATV) de Ciudad Real era la base de operaciones de esta banda. Algunos de los vehículos que los ciudadanos llevaban allí no eran dados de baja definitiva, entregándoles a los usuarios un justificante falsificado de la misma.
Colaboraban con dos empresas de Madrid especializadas en la compraventa de vehículos, que tramitaban la titularidad de un vehículo usado y supuestamente dado de baja para que los compradores que quisieran adquirir un vehículo nuevo pudieran achatararlo como si fuera suyo y aprovecharse del Plan PIVE. Para realizar el cambio de titularidad falsificaban las firmas y la documentación necesaria del anterior propietario del vehículo, que pensaba que estaba dado de baja.
Los vehículos nunca llegaban a abandonar el CATV y solo se realizaba el cambio de nombre, sin que el anterior titular supiera nada de la operación. Los nuevos dueños ni siquiera podían ver el coche, ya que todas las gestiones se realizaban a través de las 23 personas que han sido detenidas. Lo único que veían los que se beneficiaban al final de las ayudas era el dinero del Estado en sus cuentas y solo habían tenido que pagar un módico precio para ello.
