El impuesto de matriculación se creó, como su propio nombre indica, para gravar la primera vez que cualquier vehículo a motor. Es competencia directa de las Comunidades Autónomas, por eso puede sufrir variaciones en el precio según dónde se matricule al vehículo.
Durante el primer trimestre de este 2017, la recaudación del impuesto de matriculación se ha incrementado un 18,7 % si se compara con el mismo periodo del año anterior, 2016. En total, ha conseguido recaudar 89,26 millones de euros, a lo que se tendría que sumar la recaudación por el IVA y el impuesto de circulación.
La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles (ANFAC) considera que tanto el impuesto de matriculación como el IVA, en España, gravan lo mismo y, por tanto, se trata de una doble imposición de tributos. Según los fabricantes, por tanto, con el IVA tendría que ser suficiente y se debería eliminar el impuesto de matriculación.
Solicitan actualizar los impuestos
El impuesto de matriculación es regresivo y anacrónico y además, no existe en los países de nuestro entorno, afirman desde la ANFAC. Es por ello que piden que se elimine para acabar con la excesiva fiscalidad del automóvil en España, lo que ayudaría a incentivar las ventas, también, de los vehículos nuevos.
Durante los tres primeros meses del año, los compradores de vehículos han pagado una media de 294 euros por el impuesto de matriculación. Esto supone un 7,6 % más en relación con el año pasado. Según los datos de la Agencia Tributaria, el precio medio de los vehículos que se han vendido en España es de 17.021 euros, una cifra en la que se incluye el impuesto de matriculación.
El impuesto de circulación (IVTM) también se ha quedado atrasado, según los fabricantes. Bajo su punto de vista, debería tener en cuenta el nivel de emisiones y no la potencia a la hora de decidir qué tienen que pagar los propietarios por su vehículo. Actualmente, solo se tiene en cuenta la potencia del vehículo, aunque en la mayoría de las ciudades, ya que se trata de un impuesto local, han incluido bonificaciones a los vehículos que menos contaminan, que llegan a ser del 100 % en el caso de los vehículos eléctricos y del 75 % en los híbridos.