La Comisión Europea se plantea imponer peajes en todas las vías rápidas de Europa para todos los coches y los camiones. En la actualidad, en España, solo algunas autopistas son de pago y están especialmente concentradas en algunas zonas, como en Cataluña. Si se aprueba esta medida, todas las autovías y autopistas pasarían a tener un peaje.
A finales de mayo se llevará a cabo la votación para decidir si todos los conductores de países adscritos a la Unión Europea tendrán que empezar a pagar estos peajes obligatorios para todas las vías rápidas. Si la votación sale positiva, muchos se lo pensarán dos veces antes de coger el coche.
Actualización de una norma vigente
Se trata de la actualización de la directiva europea 1999/62, conocida como la Euroviñeta, creada inicialmente para gravar la circulación de los camiones de más de 12 toneladas. Desde el 2012, se incluyeron también en la medida los que pesan más de 3,5 toneladas.
A partir de este mismo año, podrían ampliarla a las furgonetas, a los coches y al resto de camiones. Hoy en día, el poner o no peajes en las vías rápidas para este tipo de vehículos es una decisión propia de cada país y no tiene que aplicarse a la generalidad de las carreteras, como se demuestra en el caso español, en el que solo algunas vías son de pago.
Una medida muy polémica
Falta por celebrarse la votación en el Europarlamento que decidirá si se sigue adelante con esta medida que, ya en su fase de estudio, ha levantado ampollas. Son numerosos los particulares y los profesionales que tienen que utilizar este tipo de vías a diario y la medida supondría un varapalo a su economía.
Por un lado, están la gran mayoría de los conductores y las empresas de transportes, que consideran esta medida como abusiva. Aparte de los particulares, los más afectados serían las pequeñas compañías de camiones que no podrían permitirse tener que pagar por todos los trayectos que realicen.
Por el otro, a su favor se encuentran las compañías de autopistas como Abertis. Desde Bruselas argumentan que se trata de un paso necesario para poder garantizar el buen funcionamiento de estas vías sin que se resientan los presupuestos estatales y poder redistribuir estos fondos a otras partidas.
Para compensarlo, la Comisión Europea está estudiando también la viabilidad de establecer un sistema de bonificaciones o de compensar este pago que hasta ahora solo se daba en algunas vías modificando otra norma.
