El Audi Q8 Concept adelanta el futuro Q8 que llegará en 2018
Tal y como se había anunciado, el Salón de Detroit ha servido de marco para la presentación del Audi Q8 Concept, un SUV con diseño que adelanta cómo será el futuro Q8 de la marca de los cuatro aros.
Y dicho Q8 será rival de los BMW X6, Ranger Rover Sport o Bentley Bentayga. Audi llega con retraso al segmento de los SUV Coupé, pero sus armas son de aúpa.
El Audi Q8 Concept cuenta con un sistema de propulsión híbrido enchufable con una potencia combinada de 445 CV, de los cuales 333 corresponden a la mecánica de combustión tradicional, un motor TFSI de 3,0 litros de cilindrada. La cifra de par se eleva hasta los 700 Nm.
En su interior, destinado a cuatro pasajeros, destaca la práctica ausencia de botonería, puesto los controles se manejan a través de pantallas táctiles.
Un exterior rotundo
El Audi Q8 Concept es toda una declaración de intenciones. No llega para ser uno más en el segmento, llega para tomarlo al asalto. De ahí sus desmesuradas medidas, con más de 5 metros de longitud y más de 2 de anchura.
Pese a sus líneas coupé, estas no son demasiado acentuadas, lo que garantiza una correcta habitabilidad en las plazas traseras. Además, ayudan los 3 metros de batalla.
En el frontal, la parrilla “Singleframe” ya clásica en la marca está secundada por faros con tecnología láser Matrix digital. Gracias a dicha tecnología, el haz de luz está compuesto por nada menos que un millón de pixeles.
Las formas del Audi Q8 Concept son muy angulosas y destilan fuerza y potencia por los cuatro costados. No dejan indiferente.
¡Ruedas de 23 pulgadas!
Su desproporcionado tamaño ayuda a acentuar la deportividad del Audi Q8 Concept. Sus medidas, 305/35 sobre llantas de 11J x 23 pulgadas, protagonizan un lateral musculoso y sencillo en el que, por ejemplo, se ha prescindido del marco de las puertas.
El diseño de las llantas de cinco palos está inspirado en otros modelos de la marca. Tampoco faltan los logotipos “quattro” en el faldón inferior.
En la zaga, destaca el spoiler que sirve para coronar una luneta trasera cuya inclinación remarca el carácter coupé de nuestro protagonista. Una de las novedades es la tira de luces posterior que recorre toda la trasera y que incorpora las luces de freno, pilotos y los intermitentes dinámicos.
Salón de lujo
Pensado para cuatro ocupantes, el Audi Q8 Concept trata a todos con mimo, y dándoles un espacio personalizado de generoso tamaño, dadas sus cotas exteriores.
Aunque por lo que destaca esta creación es por la combinación de tecnologías ya conocidas en Audi, como el virtual cockpit y el head-up display, con otras que adelantan el futuro de los interiores de la marca de los cuatro aros.
Así, una serie de pantallas incorpora los comandos antiguamente reservados a la calefacción, modos de conducción, etcétera. Aquí todo se controla digitalmente. Gracias a dichas pantallas, el diseño del habitáculo es mucho más limpio.
Además, en la proyección de la información del head-up display se emplea la realidad aumentada, dando la sensación de que dichos comandos están en el entorno real. La pantalla del virtual cockpit cuenta con una resolución de 1.920 x 720 píxeles.
Potencia y eficiencia
O la cuadratura del círculo. El Audi Q8 Concept es, como hemos adelantado, un híbrido enchufable y, como tal, combina lo mejor de dos mundos. La potencia del motor de combustión con la eficiencia del propulsor eléctrico.
El TFSI de 3,0 litros entrega una potencia de 333 CV (245 KW) y un par máximo de 500 Nm, a los que se suman 100 KW y 330 Nm de la mecánica eléctrica. Las cifras combinadas son de 445 CV de potencia y 700 Nm de par. Monta una caja de cambios “tiptronic” de 8 velocidades.
Las prestaciones no decepcionan, pues alcanza los 100 km/h en apenas 5,4 segundos. La velocidad máxima está limitada a 250 km/h.
Aunque lo más interesante es que estamos ante un vehículo realmente frugal, con un consumo medio homologado de 2,3 litros cada 100 kilómetros. Las emisiones son de 53 gramos de CO2 por kilómetro.
Va de autonomías
En modo puramente eléctrico cuenta con una autonomía de 60 kilómetros, que se extiendo por encima de 1.000 kilómetros cuando el motor térmico entra en funcionamiento. El sistema de gestión híbrido está enfocado, como no podía ser de otra manera, a lograr la máxima eficiencia. En dos horas y media podremos cargar las baterías.
Existen tres modos de conducción, el “EV” que prioriza la conducción eléctrica, el “hybrid” en la que quien ‘manda’ es el sistema de gestión híbrido y, por último, el “battery hold”, en el que se ahorra energía de la batería para usarla después.
Así es este adelanto del futuro Audi Q8 que promete convertirse en uno de los gallos del segmento de los SUV Coupé de lujo. Habrá que esperar a 2018 para conocer la respuesta definitiva de la marca de los cuatro aros en uno de los pocos subsegmentos en los que no estaba presente.