Audi abre un nuevo capítulo en la historia de las carrocerías Avant con el que será el primer familiar 100% eléctrico de su historia. Desarrollado sobre la nueva plataforma PPE que también dará vida al Q6, propone un diseño tan elegante como un rendimiento deportivo gracias a los 470 CV de potencia conjunta. Además, podrá cargar 300 km en menos de 10 minutos.
Desde hace 45 años, prácticamente cada berlina desarrollada en los cuarteles generales de Ingolstadt viene emparejada por una carrocería de corte familiar denominada Avant. La misma que a partir del 2023 entrará en una nueva dimensión con el A6 Avant e-tron que, hoy, se ha presentado bajo la estela de concept. Ponga atención a los detalles, no obstante, porque este prototipo que hemos conocido de manera virtual “adelanta en un 95% las líneas del futuro modelo de producción”, como bien nos confirmó un uno de los integrantes del equipo de diseño de Phillip Römers. Suprime las descomunales llantas, añade los tiradores en las puertas y modifica ligeramente la vista del difusor trasero para obtener el A6 Avant e-tron definitivo.
Un modelo que vendrá a completar la futura gama del A6 e-tron, presentado en su silueta berlina en abril del año pasado. Un modelo que abre un nuevo capítulo en la historia eléctrica de Audi al ser uno de los encargados de estrenar la nueva plataforma PPE (Plataforma Premium Eléctrica en sus siglas en inglés) que dará vida a un amplio número de modelos, desde todocaminos de corte urbano, hasta compactos, pasando por estas berlinas e incluso un SUV de generosas dimensiones cómo será el Q6 e-tron (el verdadero encargado de estrenar esta base).
Salta a la vista
Entrando de lleno en el A6 Avant e-tron concept, casi mantiene las mismas características que la berlina. Calca dimensiones con una longitud de 4,96 metros de largo por 1,96 metros de ancho y 1,44 metros de alto. También hereda la misma parrilla singleframe carenada e invertida que ya es un signo distintivo de los modelos e-tron de Audi. A destacar igualmente los retrovisores digitales (de los que Audi no nos ha dicho si se mantendrán o no) o las comentadas llantas de aleación de 22 pulgadas.
A partir de aquí, la carrocería Avant empieza a mostrar sus rasgos propios centrados, como es lógico, en su zaga. Allí la vista se centra tanto en el arco del techo, la inclinación del pilar D o el alerón superior que ayuda a mejorar el flujo aerodinámico. De hecho, este A6 Avant e-tron concept solo penaliza en 0.02 puntos el coeficiente de resistencia de la berlina (0,22) siendo uno de los mejores de su categoría. La deportiva silueta del concept car se ve acentuada por el cálido color Neptune Valley de su carrocería y por la tira OLED digital trasera con arquitectura espacial tridimensional. Grupos ópticos que en su parte delantera pueden ser también OLED digital alcanzando la máxima luminosidad y, al mismo tiempo personalizar la firma lumínica. A ellos se suman otros cuatro proyectores LED de alta resolución integrados en las esquinas del vehículo capaces de, generar diversas señales de aviso cuya uso dependerá de la homologación vigente en cada mercado.
De altos vuelos
Sin noticias gráficas ni informativas del interior más allá de la frase de Nikolai Martens, director del área de vehículos eléctricos de Audi, “la capacidad de carga será acorde a los estándares del apellido Avant sumando, además, un segundo compartimento en la zona delantera”, de lo que sí podemos hablar es de rendimiento. Como ocurría en su homólogo sedán, la plataforma PPE permitirá ofrecer un amplio espectro de versiones y capacidades para la batería. De momento, Audi presenta este concept con un derroche de cifras: 350 kW de potencia (470 CV) y 800 Nm de par máximo instantáneo producid por los dos motores, uno en cada eje, que le dotan de tracción quattro (habrá también modelos de propulsión trasera con un único motor), nutridos por la energía almacenada en una batería de “alrededor de 100 kWh de capacidad” con la que supera la barrera de los 700 kilómetros.
Celdas que cuentan con la misma tecnología de 800 voltios que el e-tron GT, pudiendo cargarse en tomas hasta de 270 kW de potencia, necesitando menos de 25 minutos para pasar del 5 al 80% o logrando recargar energía para recorrer otros 300 kilómetros en apenas 10 minutos. Entre sus virtudes dinámicas, Audi destaca el uso de una suspensión neumática con amortiguación adaptativa.