Bajo las marcas Lexus y Toyota, el objetivo es llegar a comercializar 3,5 millones de unidades para el año 2030 y conseguir ser neutros en carbono.
Muchos hablaban de conservadurismo para referirse a la electrificación del Grupo Toyota. La pionera en el ámbito de la hibridación parecía reticente a dar el paso a las cero emisiones. Sin embargo, una vez que Toyota y Lexus han presentado sus dos primeros modelos eléctricos, el UX 300e ya está incluso rodando desde hace meses, el Grupo nipón podríamos decir que se ha ‘desatado’.
Y es que la estrategia que contempla de aquí al año 2030 es la de lanzar nada menos que 30 modelos 100% eléctricos entre ambas marcas… para que luego digan que Toyota no apuesta por la electrificación. Su objetivo es logar unas ventas globales de 3,5 millones de vehículos para dicho año.
Para tenerlo todo bien organizado, esta estrategia se compondrá de diferentes ramas. La más importante será, sin duda, la denominada Beyond Zero (bZ) sobre la que ya se han dejado entrever tanto el bZ4X como las primeras imágenes del RZ. Una estrategia que además abraza otros fabricantes como Subaru con el desarrollo del Solterra, con quien ha desarrollado la plataforma específica para vehículos eléctricos.
Todos los escenarios
Pero esta no será la única pata del banco, sino que la estrategia eléctrica de Toyota estará formada por otras muchas, algunas de ellas muy representativas. Y es que el grupo nipón no quiere dejar de lado al conductor más pasional. De ahí que el presidente, Akio Toyoda, haya asegurado que bajo el emblema de Lexus se “desarrollará un automóvil deportivo EV con batería de próxima generación que hereda el gusto de conducir y el rendimiento cultivado a través del desarrollo del mítico LFA”. Del mismo modo, contarán con habrá modelos urbanos, comerciales, pick ups e incluso todoterrenos de gran capacidad. Todo con tal de lograr un único fin ser neutros en carbono: “queremos ayudar a realizar un mundo así. Este ha sido y seguirá siendo el deseo de Toyota y nuestra misión como empresa global. Para ese desafío, necesitamos reducir las emisiones de CO2 tanto como sea posible y lo antes posible.”