La compañía británica acaba de abrir un nuevo capítulo en su historia: la electrificación cuyo principal actor será el Spectre que lance al mercado en 2023.
No creas que hemos mezclado términos, no. Porque si eres fan de Rolls-Royce has de empezar a familiarizarte con el término Spectre, pues será el encargado de abrir un nuevo capítulo en la historia de la firma de lujo británica: el de la electrificación. De momento habrá que esperar pues la idea inicial es que esté disponible no antes de la última parte del año… 2023.
Cierto es que según se vaya acercando dicha fecha, lo iremos viendo en diferentes formatos hasta que en dos años se desvele por completo este coupé 100% eléctrico. Estará basado en la nueva plataforma Architecture of Luxury, la misma que ha dado vida en los últimos años a los Ghost, Phantom y Cullinan, suprimiendo además los rumores que apuntaban a que Rolls-Royce tomaría prestados elementos de los actuales BMW eléctricos.
De momento no hay información alguna relativa al grupo propulsor ni al sistema eléctrico. Los únicos comentarios que han surgido van en la línea de que tanto su potencia como su autonomía serán más que “suficientes”. La rumorología también sugiere qué modelo será el que desaparezca una vez que el Spectre salga a la venta. Todo apunta a que el Wraith será el gran candidato ya que el nuevo Rolls eléctrico guarda semejanzas con él: diseño, línea…, sin embargo,el CEO de la compañía, Torsten Müller-Ötvös aseguró en una entrevista que “el Spectre no será el sucesor de nadie, será una propuesta completamente diferente para nuestros clientes. Se sentirá muy diferente, se verá muy diferente”.
Müller-Ötvös también ha confirmado que el modelo que se ha presentado bajo un exhaustivo camuflaje no es un prototipo sino que podría estar listo ya para rodar. No obstante, la firma británica no se va a arriesgar a lanzar algo de manera prematura y en breve se iniciará la fase de pruebas del Spectre, alternando las condiciones climatológicas más extremas y recorriendo nada menos que 2,5 millones de kilómetros, lo que equivaldría a 40 años de vida del modelo.