España quiere convertirse en una potencia en el coche de pila de combustible .
Son muchos los que señalan que el coche de hidrógeno o de pila de combustible será el siguiente escalón de la industria automotriz tras la llegada del vehículo eléctrico. De hecho, ya hay algunos modelos a la venta en nuestro país a pesar de que solo haya cuatro hidrogeneras abiertas. Por ello, para impulsar esta tecnología, el Consejo de Ministros ha aprobado una Hoja de Ruta del Hidrógeno con la que espera que en 2030 haya un mínimo de 100 puntos de carga que abastezcan un mínimo de 150 autobuses, 5.000 vehículos ligeros y pesados y dos líneas de trenes comerciales.
En total son 60 medidas que esperan que España abandere la implantación de la pila de combustible en nuestros vehículos. No podemos olvidar que los coches de hidrógeno se recargan en apenas unos minutos, de forma similar a como se hace en la actualidad con los vehículos térmicos; ofrecen autonomías de varios cientos de kilómetros y por su tubo de escape expulsan vapor de agua.
Ayudas a todos los niveles
La Hoja de Ruta para la implantación de los coches de hidrógeno contará con instrumentos financieros para que la industria española adapte sus infraestructuras al uso de hidrógeno renovable al mismo tiempo que espera que surjan productores propios dentro de nuestro país, los cuales podrán contar con una línea especial de financiación en los planes de Investigación Científica, Técnica y de Innovación.
También prevé la identificación de los polos de consumo de la actualidad fomentando la creación de ‘valles de hidrógeno’ y promoverá la creación de Mesas de Hidrógeno Industrial en la que participaren comunidades autónomas, administraciones locales, consumidores y promotores de proyectos de producción de hidrógeno.
Previsiones
Esta misma hoja de ruta apunta a una importante aceleración en el implantación y aplicación de esta tecnología entre los años 2030 y 2050 por lo que se espera que su uso sea comparable al de otras tecnologías ya establecidas.
Y espera que España no pierda la oportunidad de convertirse en referente con respecto a esta tecnología, que nuestro país sea líder en fabricación de ensambladores de electrolizadores, pilas de combustible, componentes, vehículos, astilleros y plantas de producción y que todos estos productos se puedan exportar al resto de países de Europa.
