Analizamos la colección de coches del fundador de Tesla, Elon Musk
Siempre en la primera plana de la prensa, y no solo en la automovilística, Elon Musk es el excéntrico fundador de la marca Tesla. Considerado por unos el Steve Jobs del siglo XXI otros creen que es solo un bluf al que el tiempo pondrá en su sitio. Valoraciones personales aparte, nosotros nos fijamos en su colección privada de coches donde, como es de esperar, hay mucho más que Tesla.
BMW 320i
Fue su primer coche, una berlina cupé de tres plazas de 1978 que Elon Musk compró de segunda mano en 1994 por 1.400 dólares (algo menos de 1.200 euros al cambio actual). Entonces, el que con el tiempo creara su propia marca de coches, ya demostraba que no se conformaba con cualquier cosa, quería coches deportivos y de gama Premium.
Jaguar E-Type
Su pasión por los clásicos viene de lejos, aunque este caso es especial. El propio Elon Musk ha dicho en alguna ocasión que cuando tenía 17 años le regalaron un libro de coches clásicos y, de entre todos los que aparecían, el que más le gustó fue el Jaguar E-Type por lo que se dijo que alguna vez tendría uno. Con él ha tenido una relación de amor-odio pues ha dicho en varias ocasiones que le ha dado demasiados problemas.
McLaren F1
Se lo compró después de vender PayPal, compañía que él mismo fundó. Lo usó como coche de diario durante varios meses hasta que un día, al querer exhibir ante un amigo de qué era capaz este clásico británico, perdió el control: golpeó un muro, el coche saltó por los aires y al aterrizar perdió las ruedas delanteras. A ellos no les pasó nada, pero el coche no estaba asegurado.
Lotus Esprit Submarine
Uno de los modelos más llamativos de su colección, el Lotus Esprit Submarine que James Bond empleó en la película “La espía que me amó”. La curiosidad de este modelo es que Elon Musk lo compró con la preparación para moverse bajo el agua y, cuando intentó activar el control para que recuperara sus ruedas y pudiera circular por carretera, el coche no respondió. Ahí se dio cuenta de que era falso, era un truco utilizado en el cine.
Sin embargo, ha dicho en más de una ocasión que va a instalar algún sistema para que la transformación del coche en submarino sea real y no solo producto de la ficción.
Audi Q7
Un SUV amplio y espacioso que algunos dicen inspiró al Tesla Model X y a su solución de puertas de alas de gaviota para el acceso a las filas traseras. Y es que, decía que este modelo tenía un fallo muy serio en el acceso a la tercera fila de asientos, el espacio que quedaba para pasar era pequeño y angosto, algo que quiso solucionar con su propio monovolumen.
BMW M5
Una berlina deportiva para disfrutar de la conducción y las altas prestaciones sin renunciar a la comodidad del segmento Premium y ni al espacio de un vehículo de representación. Eso sí, se hizo con una unidad preparada por Hamann que le dota de un aspecto y una respuesta aún más radical. Eleva su potencia a 680 CV.
Porsche 911
Un clásico del mundo de los deportivos, un modelo que no puede faltar en el garaje de cualquier aficionado a la automoción. Su modelo lo adquirió en 2012.
Ford Model T
El modelo que revolucionó la automoción en Estados Unidos, primero, y a nivel mundial, después, justo como pretende hacer él con su marca Tesla. En este caso, fue un regalo que le hizo un amigo.
Tesla Roadster
Como no podía ser de otra manera, es el mejor embajador de su marca y conduce sus propios vehículos. Cuenta con una de las primeras unidades fabricadas del Tesla Roadster, un vehículo que envió al espacio como parte de la misión SpaceX y que espera acercarse al sol, alrededor del que orbitará.
Tesla Model S
Otra de sus creaciones y que es el coche que utiliza de forma habitual en la actualidad. En este caso, emplea el acabado Performance, con 610 CV, una velocidad máxima de 261 km/h y una aceleración en el 0 a 100 km/h de solo 2,5 segundos, unas cifras nada desdeñables para una berlina de 5 plazas y 805 litros de maletero (tiene dos).
Tesla Model 3
Dijo que crearía una berlina eléctrica para todos los bolsillos y esta fue su propuesta, una berlina que parte de 49.000 euros con una potencia de partida de 238 CV (se puede encontrar con hasta los 480 CV) y un maletero de 542 litros. Lo utiliza de vez en cuando.
Tesla Model X
El modelo que creó después de que no le terminara de convencer el Audi Q7, un monovolumen curioso cuanto menos por la distribución de sus seis plazas y el modo de apertura de las puertas traseras.
Tesla Cybretruck
Su última creación, un pick-up de aspecto miliar, más conocido por la presentación que tuvo. Todo lo que podía salir mal, salió fatal. Se le ha visto por California conduciendo una de las escasas unidades que se han producido.
Bonus track – Aero L-39 Albatros
No es un coche pero también forma parte de su colección. Se trata de un reactor que formó parte del ejército checo en la década de los 70 y con el que entrenaban sus pilotos. Cuenta con un diseño checo, motor ucraniano y tecnología rusa y, según ha comentado el propio Elon Musk, le gusta porque con él parece un Top Gun.