Lotus lleva varios meses planificando un hypercar eléctrico de más de 1.000 CV, un proyecto denominado ‘Omega’. El propósito de Geely, la nueva propietaria de la marca británica, era que su firma de deportivos se convirtiese en una auténtica referencia en el apartado técnico. Todo ello para adentrarse de lleno en el mercado de los superdeportivos más destacados y lujosos del panorama automovilístico.
Williams Advance Engineering, la división técnica del equipo de Fórmula 1, y Lotus han hecho oficial un convenio de colaboración para llevar a cabo el prototipo de manera conjunta, en concreto “tecnologías avanzadas de propulsión”. Este acuerdo apunta a que saldrá a la luz en el proyecto apodado como ‘Omega’, donde, pese a no desvelar muchos detalles sobre dicho pacto, se ha confirmado que ambas entidades estarán muy presentes en el desarrollo de este coche.
La ambición del diseño
El trabajo de Lotus se centrará en la puesta a punto y la construcción ligera, seña de identidad de la compañía con sede en Norfolk (Reino Unido). Por su parte, Williams dedicará todos sus esfuerzos en el tren motriz eléctrico. Esta función del vehículo superará los 1.000 CV de potencia. La marca inglesa hará gala de la destreza técnica adquirida en la Fórmula E, competición en la que es el proveedor de baterías desde que arrancara el campeonato en el año 2014.
Según se ha desvelado, el hiperdeportivo que surja del proyecto ‘Omega’ tendrá tracción a las cuatro ruedas mediante, como mínimo, un par de motores eléctricos, los cuales permitirían unas prestaciones realmente mareantes. El objetivo fijado en el aspecto de la autonomía es rebasar los 400 kilómetros, aspecto que Williams cree que podría lograr.
Una fusión estratégica
“Nuestra nueva asociación tecnológica con Williams Advanced Engineering es parte de una estrategia para expandir nuestro conocimiento y capacidad en el cambiante panorama automotriz. La aplicación de sistemas de propulsión avanzados puede proporcionar numerosas soluciones interesantes en múltiples segmentos. Nuestras experiencias combinadas hacen de esta una unión muy interesante de talento en ingeniería, capacidad técnica y espíritu pionero británico”, asegura Phil Popham, CEO de Lotus Cars.
Las informaciones revelan que el anticipo (como concept car) del coche llegaría aproximadamente dentro de un año, al tiempo que el diseño definitivo arribaría al mercado a comienzos de la próxima década. Aun así, tocará aguardar para comprobar si la unión entre Lotus y Williams, dos de las empresas más relevantes del automovilismo en Reino Unido, conlleva más proyectos de desarrollo de modelos y motores de cara al futuro.
Texto: Pedro Parra
